En 2025, muchas personas se han propuesto estar más concienciados con el medio ambiente. Pero, ¿qué acciones marcan realmente la diferencia? ¿Y cuál es un objetivo razonable? El cambio climático puede parecernos a veces fuera de nuestro alcance, pero hay algunas pequeñas acciones cotidianas que podemos hacer como individuos y en casa para contribuir a reducir los gases contaminantes, el calentamiento global y proteger así el medio ambiente.
Un ejemplo es no siempre usar el coche para ir a distintos lugares. Imagina que tienes ganas de disfrutar de juegos de casino, pero el casino queda bastante lejos para ir en coche. Hay opciones para jugar slots sin necesidad de moverte de casa gracias a los casinos online.
A continuación, echamos un vistazo a los distintos consejos que se pueden llevar a cabo en el día a día para contribuir con el cuidado del medio ambiente.
Reduce, reutiliza y recicla
En realidad, las tres erres siguen el orden de las mejores prácticas. La gente debería intentar centrarse más en reducir y reutilizar, que en reciclar. Es recomendable reutilizar plásticos difíciles de evitar -como en los que se venden el pan y las tortillas- para separar y transportar los productos, en lugar de utilizar las bolsas de plástico de la tienda.
Las personas deben ser conscientes del creciente impacto de los residuos de ropa en el medio ambiente, por lo que es recomendable comprar en tiendas de segunda mano. Llevar bolsas de tela para la compra, regar las plantas con el agua sobrante de limpiar la fruta y la verdura o utilizar tarros de cristal para conservar los alimentos son sólo algunas de las cosas que puedes hacer en casa para aplicar las tres erres y proteger el medio ambiente.
Ahorra en la energía que consumes
Limita el uso de energía, como la calefacción o el aire acondicionado, a las zonas que utilizas en tu casa. Utiliza luz natural y compra bombillas de bajo consumo.
Utiliza electrodomésticos de bajo consumo y, para hacer frente al frío, ten instalados termostatos que regulen adecuadamente la temperatura. Cierra las puertas de las habitaciones antes de salir y ahorra el agua que consumes haciendo que las duchas sean breves. Cuando cocines, prepara varias comidas al mismo tiempo.
Apoya a las empresas ecológicas
Comprar productos sostenibles y ecológicos es una forma estupenda de aportar tu granito de arena al medio ambiente desde casa. Comprar artículos como ropa, muebles y otros enseres domésticos fabricados con materiales reciclados y sostenibles no sólo te permitirá ahorrar en residuos cuando termines de utilizarlos, sino que también estarás apoyando a empresas que se preocupan por limitar su propio impacto ambiental, frente a las que se guían más por la comodidad.
Ayudar a dar a conocer las empresas sostenibles permitirá que sus productos estén más al alcance de los demás en el futuro. Involucrar a tu comunidad es esencial. Considera la posibilidad de organizar actividades en grupo como la recogida de basura, la limpieza de los cursos de agua locales y la plantación de árboles y arbustos para mejorar la zona y evitar la erosión del suelo.
Correr la voz y animar a otros a participar en estos esfuerzos puede tener un impacto positivo no sólo en tu comunidad, sino también en otros lugares.
Crea un jardín respetuoso y sé consciente de tus viajes
Aprovechar los espacios al aire libre en beneficio de la fauna te permitirá ayudar al medio ambiente desde la puerta de tu casa. Si añades a tu jardín plantas aptas para polinizadores, dejas que algunas zonas de hierba crezcan más y utilizas setos en lugar de vallas en los límites, crearás un hábitat y un paso seguro para pájaros, insectos y pequeños mamíferos.
Además, tener un montón de compost en el jardín dará cobijo a bichos y pequeños mamíferos, y te permitirá deshacerte tú mismo de los materiales compostables.
Sé consciente de cómo te transportas
Nuestros hábitos de viaje tienen un enorme impacto en el medio ambiente, por lo que es importante pensar en cómo hacerlo de la forma más eficiente. Compartir los ascensores para ir al trabajo o por ocio, utilizar medios de transporte público que consuman menos energía y desplazarse en bicicleta o a pie son formas de reducir las emisiones de carbono en los desplazamientos.
Además, cada vez somos más los que optamos por vehículos eléctricos e híbridos en sustitución de los de gasolina y diésel, en un intento por ser más respetuosos con el medio ambiente.