“Los correos electrónicos recientemente publicados ilustran la notablemente estrecha relación que mantenían el actual director de la EPA, Scott Pruitt y la industria del petróleo y el gas y demuestran que mientras se desempeñó como procurador general de Oklahoma (desde 2011 hasta la semana pasada) la protección del Medio Ambiente no estaba entre sus prioridades.”
Demanda judicial
Dichos correos electrónicos se hicieron públicos como resultado de una demanda judicial y solicitud de registros abiertos hecha por el Centro de Medios de Comunicación y Democracia, pocos días después de la confirmación de que Pruitt dirigiría una agencia contra la que por largo tiempo luchó abiertamente.
El procurador general de Oklahoma ha sido un ferviente partidario de las compañías de combustibles fósiles y en varias ocasiones buscó frenar los reglamentos de salud pública, de los que pronto será responsable, como jefe de la Agencia de Protección del Medio Ambiente.
Sugerencias y consejos
Entre los más de 7.500 documentos, hay uno que revela cómo los operadores de la industria del petróleo y el gas hacían “sugerencias” de redacción y correcciones a un texto, que Pruitt luego envió a una agencia federal y que afectaba a las tarifas de servicios públicos y a los impactos medioambientales de la Oklahoma Gas & Electric y American Electric Power (conocidos contribuyentes a sus campañas electorales).
El más cercano aliado de Pruitt sería la Devon Energy, uno de los mayores productores de petróleo de los Estados Unidos. Los nuevos correos electrónicos muestran varias comunicaciones entre el personal de Pruitt y Devon, en las que se demuestra, por ejemplo, que le empresa esperaba su apoyo para contrarrestar una petición de los estados del noreste que buscaban reglamentos para el metano más estrictos.
Pero Devon no era la única que se beneficiaba de trabajar con Pruitt. El presidente de la filial de servicios públicos de AEP, Public Service Co. de Oklahoma, escribió a Pruitt en febrero de 2014 dándole las gracias por ayudar a la compañía y darles “el tiempo y la oportunidad de desarrollar un plan estatal revisado», evitando así un plan federal impuesto por la EPA, referido a la protección del Medio Ambiente.
Y lo que falta
Los empleados de la Procuraduría General de Oklahoma solicitaron en varias oportunidades que el nombre de la oficina y el de su jefe no apareciera en las peticiones; en consonancia con la búsqueda de la privacidad en las comunicaciones, dicha Procuraduría todavía no ha publicado todos los correos electrónicos que el Centro de Medios y Democracia solicitó.
Incluso después de que la jueza del caso criticara a la oficina por su «abyecto fracaso» al intentar retener información, la Procuraduría alegó que un número no especificado de documentos eran de índole “privada”. Pero la jueza dictaminó que la oficina del procurador general tiene que entregar la totalidad de la documentación antes del 27 de febrero.