El nuevo sistema de cálculo de emisiones de dióxido de carbono (CO2), el ciclo WLTP, permitirá impulsar la venta de vehículos electrificados en España, según ha afirmado la compañía de renting Swipcar.
La empresa ha previsto que la entrada en juego del WLTP, el próximo 1 de enero, podría suponer una oportunidad para los coches de etiqueta ECO y CERO, ya que repercutirá en un aumento de costes en matriculación para vehículos con emisiones en torno a 120 gramos de CO2.
Swipcar ha solicitado la implicación de las instituciones a la hora de hacer más atractiva para el consumidor la compra de un coche eléctrico, a través de medidas que faciliten su recarga. La empresa ha destacado que la mitad de las estaciones que actualmente se encuentran en activo en España están concentradas en Madrid (1.760 puntos) y Barcelona (2.731 puntos).
«Con el 50% de puntos de carga que Francia, pero con una ratio de coches similar, España está lejos de los primeros puestos europeos en cuanto a implantación de red eléctrica de recarga» ha explicado Swipcar. El consejero delegado de Swipcar, Julio Ribes, ha señalado que esta carencia supone «un hándicap a la hora de impulsar los vehículos eléctricos e híbridos».
Según Ribes, muchos clientes encuentran la carencia de puntos de carga algo determinante a la hora de descartar la contratación de un vehículo de estas características. El directivo de la empresa ha señalado como necesaria el incremento de estaciones de recarga para que el coche eléctrico consiga implantarse satisfactoriamente en España. Un proceso sin el que, según ha explicado Ribes, será complicado impulsar una transformación real «en pro de la mejora del medio ambiente».