España está haciendo historia en el sector de los coches eléctricos. A través de un invento revolucionario, podría acabar con uno de los problemas mayoritarios de esta tecnología. Los vehículos electrificados son vistos como el futuro de la movilidad sostenible. Sus diferentes fabricantes los comercializan como aparatos que acotan las emisiones de carbono y bajan la dependencia de combustibles fósiles.
Sin embargo, esta idea “paradisíaca” para el sector se ve opacada por los muchos incendios registrados en vehículos de esta categoría. Esto sucede a causa de las baterías de iones de litio que utilizan. Ofrecen una alta densidad energética.
En otras palabras, almacenan una gran cantidad de energía en un volumen acotado, lo que resulta ideal para maximizar la autonomía del coche eléctrico. No obstante, también trae consigo algunos riesgos.
Cuando fallan, puede originarse un fenómeno llamado “fuga térmica”. Sucede cuando una celda de batería se sobrecalienta y libera energía de forma desproporcionada. Si no se logra disipar el calor de forma óptima, la situación podría derivar en una reacción en cadena en otras celdas, dando lugar a un incendio intenso y difícil de apagar.
España tiene la solución para el peor problema de los coches eléctricos
Si la nueva función para coches eléctricos te resultó sorprendente, espera a ver el último invento de España. Ha encontrado la solución definitiva para acabar con los incendios en los vehículos electrificados. La propuesta se llama Ecofire Fighting.
Originalmente, su creación llegó de la mano del español César Sallen. Después, fue desarrollada por la empresa aragonesa Simonrack. Se trata de un agente de extinción líquido que basa su funcionamiento en fibra de celulosa y almidón, 100% orgánico, biodegradable y libre de sustancias tóxicas.
Al aplicarlo sobre un vehículo eléctrico o una batería de litio en llamas, la solución permite extinguirlas con una efectividad de entre 40 y 100 veces superior a la del agua. Su acción es entre 6 y 10 veces más ágil que esta y necesita de un volumen de líquido hasta 20 veces más bajo.
Solución de España para acabar con los incendios de los coches eléctricos
No obstante, su mayor atributo es su capacidad para envolver el fuego en una capa orgánica que actúa como barrera de contención. De esta manera, permite que los bomberos puedan trabajar con seguridad más cerca del foco de las llamas.
En simultáneo, permite evitar que el mayor peligro de los incendios de este tipo: la creación de explosiones en cadena. Encapsula las llamas, el humo y las emanaciones tóxicas de la batería de litio incendiada.
Un conjunto de factores que permiten que Ecofire Fighting proteja cualquier otro componente sensible cercano. Por ejemplo, el resto de los vehículos estacionados en un parking, estacionamiento subterráneo o explosivos depositados en un almacén.
España ha demostrado que es posible controlar los incendios de los coches eléctricos
Hasta ahora, era muy complejo controlar los incendios de los coches eléctricos, pero una prueba en Barcelona demostró que es posible. Empresas y bomberos del sector quedaron sorprendidos con el alcance de esta sustancia ecológica.
Logró apagar dos focos sumamente peligrosos sin perjudicar a los vehículos ni estructuras próximas. Además, su ejecución fue rápida y limpia. La solución de Ecofire Fighting está compuesta de una mezcla natural de fibra vegetal y almidón.
Trabaja encapsulando fuego y gases, conformando una especie de escudo térmico que corta la reacción en cadena que suele originar explosiones sucesivas. Impide la propagación del fuego, al mismo tiempo que descarta el humo tóxico desde el primer momento. Todo esto acotando el riesgo de intoxicación y sin dejar rastro.
Cuando se enfría, el terreno queda hasta más fértil, dado que el producto contribuye a la regeneración del suelo. Con estos extraños implantes en coches eléctricos, España nos muestra un nuevo camino donde la movilidad electrificada tiene superado uno de sus mayores problemas. En paralelo, Japón asegura que, en realidad, este es el futuro.