Cabe destacar que la Fundación Naturaleza y Hombre (FNYH), la cual está celebrando su quince aniversario, introdujo, en 2008, 16 caballos losinos en las praderas saladas de las Marismas de Alday como método de control del plumero y la chilca, especies de flora alóctona invasora, que causan estragos en la marisma y en otras áreas de la bahía en las que se ha producido un abandono del pastoreo. La presencia de estos equinos, en peligro de extinción, forma parte del proyecto de restauración hidrológica-forestal de agua salada en la zona descrita anteriormente y la llegada de estos ejemplares fue posible gracias a la colaboración de la Asociación de Criadores de caballos losinos El Bardojal, que cedió los ejemplares, de raza autóctona del valle de Losa, ubicado en la provincia de Burgos.
Desde la Fundación Naturaleza y Hombre, que dirige Carlos Sánchez, se destaca que gracias a los trabajos que está desarrollando, este espacio gestionado por ellos se encuentra en un estado óptimo de conservación y es un refugio para una gran cantidad de aves.