El investigador, invitado a la franja Jueves de la Biodiversidad, en el marco de la celebración de los 75 años del Instituto de Ciencias Naturales de la UN, explicó que ha venido trabajando desde hace tiempo en la filogenia, es decir, el nacimiento o procedencia de una tribu o raza, en su caso particular de las plantas, para determinar su historia evolutiva.
“Hicimos una comparación de la migración entre plantas y animales y comprobamos una hipótesis: que las plantas tienen una mayor capacidad de moverse a través del mar o cualquier parte de tierra, pero principalmente a través del mar”, dijo el científico.
En el estudio, el profesor Richardson comprobó igualmente que las plantas tiene un sistema de reproducción asexual, lo que facilita el establecimiento en un lugar, “a diferencia de otras muchas especies que necesitan una relación para radicarse y colonizar”.
“Estamos reconstruyendo con secuencias de ADN y podemos determinar también la edad de los eventos de la evolución”, manifestó el profesor, al tiempo que agregó que con esta herramienta ya se puede determinar la época de desplazamiento de una planta entre las Américas, así como las especies de animales.
Estos resultados son importantes en el estudio de la historia natural, porque permiten reconstruir históricamente la llegada de diferentes linajes a las dos Américas e interpretar el intercambio biótico americano antes y después de formarse el Canal de Panamá.