Frente al crecimiento acelerado del turismo convencional, que en muchos casos deja una huella negativa en ecosistemas frágiles y comunidades locales, los colectivos ecologistas insisten en la necesidad de un cambio de paradigma que sitúe el bienestar ambiental y social en el centro.
En sentido y tras la celebración el pasado sábado del Día Mundial del Turismo, ecologistas y organizaciones ambientales han vuelto a alzar la voz para reclamar un modelo de ecoturismo respetuoso, inclusivo y verdaderamente sostenible, capaz de equilibrar la actividad económica con la conservación de la naturaleza.
Ecoturismo, trabajo de desarrollo sostenible y no solo una mera imagen
Como cada año, el 27 de septiembre se celebra el Día Mundial del Turismo promovido por la Organización Mundial Del Turismo (OMT). Bajo el lema «Turismo y transformación sostenible», ecologistas insisten en que para lograrlo es necesario que se desarrolle teniendo en cuenta a la naturaleza y que se plantee como una actividad inclusiva para todas las personas.
Las organizaciones apuntan que, a pesar de las evidentes señales de alerta, algunas administraciones y sectores siguen apostando por el mismo modelo turístico de las últimas décadas, centrado en la cantidad y no en la calidad. Un ejemplo claro de esta tendencia es la reciente propuesta del Gobierno español de destinar casi 13.000 millones de euros (plan 2027-2031) para la mejora de los aeropuertos, una inversión cuatro veces superior a la actual.
Esta apuesta por la infraestructura masiva contrasta además con la situación en Catalunya, donde aún está abierto un procedimiento de infracción europeo por la ampliación del aeropuerto de El Prat de Llobregat debido a la falta de cumplimiento de las medidas compensatorias de la ampliación pasada (hace ya dos décadas) y la perdida de hábitats y biodiversidad, en el delta del Llobregat.v La Comisión Europea ya ha advertido sobre los riesgos que esta expansión implicaría para las aves y los ecosistemas.
Ejemplos de un turismo de naturaleza sostenible
Teniendo en cuenta la situación de emergencia climática y de pérdida de biodiversidad, los ecologistas hacen un llamamiento a todos los actores implicados en el turismo para que adopten un modelo de turismo de naturaleza sostenible, que respete y conserve tanto los ecosistemas como a las personas que dependen de ellos. «Solo a través de un turismo que promueva la conservación de la biodiversidad, la accesibilidad para todos y el desarrollo local sostenible, podremos asegurar un futuro donde el turismo sea un verdadero motor de desarrollo regenerativo».
Consideran que un turismo responsable y respetuoso con la naturaleza no solo es posible, sino imprescindible para preservar el patrimonio natural para las generaciones futuras. «Hoy, más que nunca, es el momento de actuar para asegurar que el turismo sea una herramienta de conservación, inclusión y desarrollo sostenible», añade Prieto.
Algunas entidades ambientalistas se encuentran involucradas en varios proyectos clave que buscan promover el turismo de naturaleza responsable, la conservación de la biodiversidad y la resiliencia de los ecosistemas y puede constatar que, no sólo es posible, sino que los beneficios para la naturaleza y las personas son evidentes.
A través de Flow4Bio, desarrollado en colaboración con diversas comunidades autónomas como Catalunya, Islas Baleares, Aragón, Asturias y Canarias, se promueve el desarrollo de un turismo de naturaleza responsable en Espacios Naturales Protegidos (ENP), con un enfoque en la resiliencia de los bosques y la preservación de la biodiversidad.
Actualmente, se encuentra evaluando los impactos sobre las aves y la biodiversidad a través del seguimiento con cámaras y con la realización de encuestas a los visitantes para proponer medidas que se integren en los planes de uso de los espacios naturales y se unifique así la gestión de aquellos que presentan un alta frecuentación humana.
Una iniciativa innovadora que ha promovido es la integración de la inteligencia artificial (IA) para promover un turismo respetuoso, accesible e inclusivo en ocho Reservas de la Biosfera bajo el nombre de Naturaleza Conectada. Apuesta nasí por reducir la masificación de los espacios naturales y fomentar un turismo con menor impacto ambiental a través de la tecnología, con el objetivo de desestacionalizar el turismo y mejorar la accesibilidad, beneficiando tanto al medio ambiente como a las comunidades locales.
Entre las principales aportaciones de esta iniciativa, destaca la aplicación de soluciones tecnológicas avanzadas, como la inteligencia artificial, para ofrecer información en tiempo real sobre rutas adaptadas, albergues accesibles y recursos locales. De este modo, se facilita la planificación personalizada y se contribuye a la modernización de pequeños negocios rurales, generando un impacto positivo en la lucha contra la despoblación.
Otro ejemplo de turismo inclusivo que favorece una mayor conciencia ambiental y fomenta la inclusión social que la ONG está llevando a cabo es Rooted, un proyecto europeo dirigido a acercar a las personas mayores a la naturaleza, construyendo puentes entre generaciones y promoviendo la participación activa de las generaciones más jóvenes en la conservación del entorno natural.
Se pretende reconstruir el vínculo animando a las generaciones mayores a compartir experiencias mientras aprenden nuevas habilidades utilizando herramientas modernas como aplicaciones de identificación de aves y plantas.
Así, con motivo del Día Mundial del Turismo, recuerdan que la transformación del sector pasa por poner en el centro a la naturaleza y a las personas. La organización insiste en que el futuro del turismo debe construirse desde la responsabilidad, la accesibilidad y la conservación, alejándose de un modelo basado en la masificación y la sobreexplotación de los recursos.
Solo así será posible garantizar que el turismo actúe como verdadero motor de desarrollo sostenible, capaz de proteger la biodiversidad, generar oportunidades locales y asegurar el disfrute de nuestro patrimonio natural para las generaciones presentes y futuras.
En este sentido, el ecoturismo se plantea como un motor de desarrollo sostenible: crea empleo digno, fomenta la cultura local, incentiva la conservación y genera ingresos que pueden reinvertirse en proyectos ambientales y comunitarios. ECOticias.com