Proyecto Gran Simio propone declarar Santuario Marino a la zona del Estrecho de Gibraltar para proteger a sus orcas

Publicado el: 31 de julio de 2025 a las 10:09
Síguenos
Proyecto Gran Simio propone declarar Santuario Marino a la zona del Estrecho de Gibraltar para proteger a sus orcas

Las orcas tienen un papel fundamental en el equilibrio de los ecosistemas marinos, ya que como depredadores tope, su presencia ayuda a mantener la salud de las poblaciones de sus presas, como peces, calamares y mamíferos marinos menores. Acción que previene la sobrepoblación de ciertas especies, lo que a su vez garantiza la estabilidad de la biodiversidad.

En ellas se han fijado los responsables del Proyecto Gran Simio y sobre todo en las que se encuentran en la zona del Estrecho de Gibraltar. Para ellas piden medidas que faciliten su conservación y la protección de su hábitat natural como parte esencial para mantener el equilibrio y la riqueza que su presencia trae en las aguas que bañan la localidad de Barbate. 



Las orcas: objeto de protección del Proyecto Gran Simio

El Proyecto Gran Simio, organización internacional dedicada a la defensa de los grandes simios, pueblos originarios y de los derechos de los seres sintientes no humanos, junto con el Corredor Biológico Mundial que aglutina en su Comité Internacional a numerosos científicos, solicitan de forma urgente a las autoridades españolas y europeas la declaración de Santuario Marino para las orcas del Estrecho de Gibraltar, especialmente aquellas que residen en la zona de Barbate, donde desde 2020 se han registrado interacciones frecuentes con embarcaciones de recreo.

Estas orcas, que forman una subpoblación catalogada en peligro, están siendo injustamente calificadas como “agresivas” por ciertos sectores, cuando en realidad podrían estar reaccionando al estrés acústico, a traumas por colisiones pasadas, a la intrusión constante de embarcaciones o incluso mediante comportamientos lúdicos típicos de individuos jóvenes.



“Las orcas no son intrusas. Expulsarlas sería un acto de violencia contra una especie consciente que pide respeto y convivencia”, ha declarado Pedro Pozas Terrados, Director Ejecutivo del Proyecto Gran Simio.

Medidas urgentes para proteger a las orcas

El Proyecto Gran Simio y el Corredor Biológico Mundial hacen un llamamiento a las autoridades del Ministerio para la Transición Ecológica, al Gobierno de Andalucía, a la Comisión Europea y a la comunidad científica internacional para que se adopten de inmediato las siguientes medidas:

  • Declaración del Estrecho como Santuario Marino para Orcas
  1. Creación de una Zona de Especial Conservación (ZEC) en el área de Barbate. España ya cuenta con zonas ZEC y Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) dentro de la Red Natura 2000
  2. Regulación del tráfico náutico en épocas sensibles.
  3. Prohibición de sistemas acústicos dañinos.
  4. Protección de zonas críticas de cría y alimentación.
  • Reconocimiento legal como ‘personas no humanas’ o ‘entidades con derechos’
  1. Aplicación del principio de sujeto de derechos a esta población de orcas.
  2. Protección jurídica de su hábitat, integridad y cultura social.
  • Creación de un Comité Ético-Científico de Supervisión
  1. Formado por etólogos, conservacionistas, juristas ambientales y asociaciones locales.
  2. Análisis continúo del comportamiento de las orcas y evaluación de medidas no invasivas.
  • Campañas educativas y mediáticas
  1. Difusión de la verdadera naturaleza de las orcas: inteligentes, sociales y sensibles.
  2. Formación en escuelas, medios y puertos deportivos.
  3. Lemas como: “Ellas viven aquí. Nosotros solo navegamos.”
  • Tecnología para la convivencia
  1. Implementación de boyas pasivas para monitoreo acústico.
  2. Sistemas de alerta voluntarios para embarcaciones.
  3. Desvíos temporales de rutas sin agresión ni expulsión de los cetáceos.

Orcas, símbolo de avance en la justicia ecológica

Las orcas del Estrecho son un símbolo de resistencia de la vida marina frente al avance desmedido de la actividad humana. Su protección no solo responde a una necesidad ética y ecológica, sino que también representa un paso adelante en el reconocimiento de los derechos de los seres sintientes no humanos.

“No podemos permitir que se repita la historia de expulsar a especies nativas de su hábitat por el simple hecho de que interfieren con nuestras actividades económicas o recreativas, como ocurrió con el exterminio de la foca monje en nuestras costas. Proteger a estas orcas es un deber moral, ecológico y científico”, afirma Pedro Pozas que además es Vicepresidente del Corredor Biológico Mundial

Las orcas son súper depredadoras, clave para el equilibrio marino. Su presencia regula otras poblaciones y su impacto va más allá de la cadena alimentaria: ayudan a fertilizar el océano con nutrientes esenciales que estimulan el fitoplancton, base del ecosistema marino y sumidero natural de carbono. Protegerlas es proteger el clima y la biodiversidad. Los medios deben dejar de criminalizar a las orcas. No son monstruos marinos, son seres inteligentes con culturas propias y estructuras sociales complejas. Ya es hora de reconocer sus derechos”.

El Corredor Biológico Mundial y el Proyecto Gran Simio invitan a las autoridades, a la comunidad científica, a las ONGs ambientales y a la sociedad civil a sumarse a este llamamiento por la vida, la inteligencia no humana y la defensa de la biodiversidad.

Y es que cuidar de las orcas es hacerlo de la salud de los ecosistemas marinos, además de respetar el valor cultural y natural de las mismas y garantizar su supervivencia para que siga habiendo futuras generaciones de esots fantásticos animales del mar. ECOticias.com