El grupo de eurodiputados viajó a la zona el pasado mes de febrero para conocer de primera mano la versión de los ecologistas que denuncian el impacto medioambiental y los riesgos para la salud de los vertidos tóxicos de varias industrias de fertilizantes y los niveles radioactivos en el estuario de Huelva.
El informe provisional, redactado por la eurodiputada francesa Pascale Gruny (PPE), advierte de que «aunque no estamos en posición de cuantificar con precisión el grado de riesgo, está claro que existe» y pide un estudio de impacto «específico» para evaluar la contaminación del suelo y el agua.
En cualquier caso, los eurodiputados consideran que «el lugar en su conjunto debe ser descontaminado con el objetivo de mantener la región en un estado conforme a la legislación comunitaria actual» y piden que se aplique el principio de «quien contamina paga».
ECOticias.com – ep