Uno de los objetivos clave en el cuidado del medio ambiente es acabar con la contaminación derivada del plástico. Basta un dato esclarecedor y estremecedor: más de 400.000 toneladas de plástico se producen en el mundo cada año y apenas se recicla el 10%.
Tal es la realidad tan grave que casi sin darse cuenta cada persona al año consume más de 50.000 partículas de plástico cada año; y eso sin contar las que se inhalan.
El problema viene sobre todo con el plástico de un solo uso, desechado o quemado. Este tipo perjudica la salud humana y la biodiversidad, además de contaminar los ecosistemas, desde las montañas hasta el fondo de los océanos.
El plástico «invisible» que todo lo contamina
Más de 400.000 toneladas de plástico se producen en el mundo cada año, de las cuales menos del 10% se recicla. 11 millones de toneladas acaban cada año en lagos, ríos y mares, lo cual equivale aproximadamente al peso de 2200 torres Eiffel juntas. Acabar con la contaminación de los plásticos es una misión compartida por todos para salvaguardar y restaurar el planeta, capacitando a gobiernos, empresas, comunidades y personas para impulsar un cambio sostenible.
El plástico de un solo uso, desechado o quemado. perjudica la salud humana y la biodiversidad y contamina todos los ecosistemas, desde las cumbres de las montañas hasta el fondo de los océanos. Los microplásticos, pequeñas partículas de plástico, llegan a los alimentos, el agua y el aire. Se calcula que cada habitante del planeta consume más de 50.000 partículas de plástico al año, y muchas más si se tiene en cuenta la inhalación.
La contaminación por plásticos está asfixiando el planeta
La contaminación por plásticos está asfixiando el planeta, dañando los ecosistemas, el bienestar y el clima. Los residuos plásticos obstruyen los ríos, contaminan los océanos y ponen en peligro la vida silvestre. A medida que estos se descomponen en parte cada vez más pequeñas, se infiltran en todos los rincones de la Tierra: desde la cima del monte Everest hasta las profundidades del océano; desde el cerebro humano hasta la leche materna”
Antonio Guterres, secretario general de la ONU, ha alertado en más de una ocasión que ya existe un movimiento a favor de un cambio urgente con un “creciente” compromiso público, pasos hacia la reutilización y una mayor responsabilidad, y la creación de políticas para reducir los plásticos de un solo uso y mejorar la gestión de residuos.
“Este año necesitamos un acuerdo ambicioso, creíble y justo, que cubra el ciclo de vida del plástico, a través de la perspectiva de las economías circulares, que responda a las necesidades de las comunidades y se alinee con objetivos medioambientales más amplios, y que se aplique rápida e íntegramente», explica.
Guterres instó a los negociadores a que “vuelvan a las conversaciones en agosto decididos a encontrar una vía común para superar sus diferencias y lograr el tratado que nuestro mundo necesita”. ECOticias.com




















