La Plataforma S3 ayuda a los países y regiones de la UE a desarrollar, aplicar y revisar sus estrategias de investigación e innovación para la especialización inteligente (RIS3). Los casos de éxito, publicados en la web de la citada plataforma, cuentan con una breve descripción de las herramientas y medidas políticas aplicadas. Su difusión a través de esta plataforma europea facilitará que otras regiones similares puedan aplicar estas buenas prácticas.
Tras una década de intensa colaboración público-privada en este ámbito, unas 239 empresas industriales vascas están aplicando en la actualidad prácticas o modelos circulares, como el ecodiseño, la remanufacturación, la evaluación del ciclo de vida, o las declaraciones medioambientales.
En concreto, la plataforma S3 destaca tres iniciativas: el Basque Ecodesign Center, que desde 2011 integra el ‘pensamiento del ciclo de vida’ en las estrategias de las mayores empresas vascas, como Iberdrola o Eroski; el Programa de Innovación en la Economía Circular, que genera oportunidades de negocio circulares para pymes a través de proyectos de demostración desde 2017; y el Basque Ecodesign Hub, que lleva más de 5 años dotando de habilidades empresariales circulares a jóvenes y apoyando su empleabilidad.
Los resultados de los proyectos llevados a cabo por empresas del País Vasco gracias al estímulo por parte del Gobierno Vasco muestran numerosos ejemplos de empresas que introducen innovaciones circulares de productos o procesos que han dado lugar a mejoras de la productividad a través del ahorro de materiales y del consumo de energía.
La selección por parte de la Comisión Europea del caso del País Vasco supone un apoyo pleno a la Estrategia de Economía Circular del País Vasco 2030, puesta en marcha en enero de 2020, que pretende aumentar la productividad del material y la tasa de uso de material circular en un 30%, así como reducir la generación de residuos por unidad de PIB en un 30%. Se estima que estas soluciones circulares innovadoras podrían dar lugar a una reducción anual del 6% en el consumo de materias primas y, por tanto, un ahorro de 2.000 millones de euros para las empresas.
Fuente: Ihobe