Susana Malón llevaba casi diez años trabajando en el sector del alumbrado exterior cuando decidió emprender su propio proyecto empresarial y personal. Así nació Lumínica Ambiental, una empresa especializada en contaminación lumínica y alumbrado exterior que ofrece servicios de consultoría y asistencia técnica desde muy distintos ámbitos.
Para ello, esta emprendedora cuenta que partió de cero, sin infraestructura inicial y utilizando sus propios ahorros. En sus comienzos, el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz le dio la asistencia necesaria para analizar la viabilidad del proyecto, junto con la Cámara de Comercio de Álava, que le ayudó con las gestiones para la puesta en marcha de la empresa. Durante seis meses, también recibió una subvención de este Ayuntamiento a través de una beca para emprendedores con ideas empresariales innovadoras.
A pesar de las limitaciones impuestas por la actual situación económica, el balance que hace Susana Malón de su experiencia es positivo. «Ya tengo tres proyectos en marcha y todo el instrumental técnico necesario para ejecutarlos, así como la página web, que es fundamental en el momento actual, puesto que no estar en la red ni en las redes sociales nos deja fuera de juego».
«La principal dificultad es encontrar a los clientes que más interés pueden tener por nuestros proyectos y ajustar nuestra filosofía de trabajo a las necesidades de los clientes, potenciales o no, lo que nos ha llevado a mejorar y ampliar nuestro abanico de servicios», concluye.