Cuéntanos tu trayectoria ecológica ¿Qué produces, dónde y cómo?
Yo he sido siempre caddie y me he dedicado al circuito profesional de golf. He viajado por todo el mundo acompañando a los mejores golfistas del circuito internacional, pero me aburrí. Ten en cuenta que eran más de treinta viajes al año, a veces cincuenta. Aviones, aeropuertos, viajes de aquí para allá… era fácil ganarse la vida, pero era monótono y siempre de un lado para otro.
Volví a la tierra y me dediqué a plantar olivos y ponerlo todo en ecológico, pero no solo olivos, también hortalizas y verduras porque me gusta tener todo muy diversificado. Vivo en la casa de mi tatarabuelo y presumo de tener el tractor más pequeño del pueblo, pero vivo la vida que quiero tener, porque mi infancia ha trascurrido siempre en el campo: he pisado uvas cuando era pequeño, he visto los carros con bueyes, es un mundo que conozco desde crio.
Trabajar en ecológico me permite ser libre y no tener dependencias de nada, tampoco de los productos químicos, producir mi aceite, que es el mejor del mundo, y venderlo directamente. Eso sí, para ser un agricultor ecológico te tiene que gustar, o te gusta o no te gusta, tienes que llevarte bien con la naturaleza, entenderla y vivir según tus conceptos. Si sigues las pautas que te marquen, estás jodido. Si me preguntas qué es la agricultura ecológica te diré que mucho trabajo y poco dinero, pero la calidad de vida no se compra con dinero y, en mi caso, estoy agustísimo.
¿Por qué vienes al EKOmercado?
Voy porque tengo que ir. Porque la esencia de esto está en la venta directa, es que tiene que ser así, sí o sí. La gente viene al EKOmercado a comprar y los pequeños productores tenemos que hacer nuestras ventas directamente al consumidor, huyendo de cooperativas. Para mí es la puesta en escena de los productores, lo veo fantástico.
¿Por qué consumir productos ecológicos?
Si la gente se preocupara por lo que come vería que es acojonante todo lo que se echa en la agricultura, y estamos hablando de salud, no son chorradas. Consumir en ecológico te garantiza que lo que comes va a ser saludable, que no tiene químicos, que no te tienes que preocupar. Además es una lucha contra el despoblamiento, una lucha por el entorno rural y por la libertad: la capacidad de los agricultores de tomar sus propias decisiones en cuanto a qué y cómo cultivar.
Fuente: Navarra Ecologica
