De acuerdo a los datosoficialesquefacilita el Gobierno de Asturias de contaminación atmosférica y calidad del aire en su web de acuerdo a la obligación que tiene recogida en la Directiva 2008/50/CE y el R.D 102/2011, cosa que no hacen con las 45 estaciones público-privadas que de forma intencionada ya que el Principado no facilita los datos en continuo de estas estaciones que están monitorizadas porque son peores datos que las 21escogidas de las que sí dan datos en continuo, en una demostración continua de falta de transparencia. Eso que el Principado está cambiando de ubicación las estaciones que peores datos dan, buscando emplazamientos menos contaminados.
-Enalarmaesta la zona de Tudela Veguin que presenta una mediade262µg/m³por partículas Pm10 en las ultimas 24 horas, un valor400%veces el valor de alarma. Esta estación el Principado no da datos en continuo de forma intencionada. Al estar muy próxima a la cementera, estos peligrosos valores alcanzados tendrán que ver con las nubes de polvo que se pudieron vivir en las ultimas horas.
La O.M.Srecomienda unos valores límite para partículasde20 µg/m3de media anual para las Pm10 y un valor de alerta con una media diaria de50 µg/m3para las Pm10, la tolerante normativa está40 µg/m3de media anualy de50 µg/m3para las 24 horas para las Pm10 un máximo de35díasde acuerdo al RD 102/2011. El Principado no regula los picos de contaminación a pesar de que los científicosreconocen su impacto en la salud con el agravamiento de las personas afectadas.
La contaminación del aire es la principal amenaza ambiental a la salud pública. La Organización Mundial de la Salud (OMS), estima que cerca de siete millones de muertes al año son atribuibles a la mala calidad del aire ambiental y en interiores. El informe del Estado Global de la Calidad del Aire (State of Global Air) 2019, identificó a la contaminación atmosférica como el quinto factor de riesgo de mortalidad a nivel mundial en 2017.
La exposición a la contaminación del aire está asociada también con el incremento de enfermedades respiratorias y cardiovasculares. La población que vive en condiciones de vulnerabilidad, los niños menores de cinco años, los adultos mayores y las personas con preexistencia de enfermedades respiratorias y cardiovasculares sufren los efectos más nocivos de la contaminación del aire.
Coordinadora Ecoloxista d’Asturies