Irse de vacaciones en plan ecoturismo en España es muy fácil. Además de los paisajes salvajes, no podemos olvidar aquellos que son el resultado del trabajo e ingenio del ser humano, ya que nuestro país cuenta con grandes obras paisajísticas de renombre mundial, como es el caso de los jardines nazaríes de La Alhambra. De cara a las vacaciones, puede ser el momento perfecto para descubrir auténticas maravillas de la naturaleza sin salir de nuestro territorio.
Los Jardines Selgas
Estos jardines se encuentran englobados en el conjunto conocido como Quinta de Selgas. La característica principal de este complejo de ecoturismo es que podemos encontrar diferentes tipos de jardines, como pueden ser el jardín italiano, el inglés o una clara predominancia del jardín francés, todo en un mismo espacio y siguiendo la moda de las épocas en la que se desarrollaron. Estos jardines tienen una extensión de unos 90.000 metros cuadrados en los que perderse.
Selva de Irati
Con más de 17.000 hectáreas que se mantienen casi intactas, este espacio de ecoturismo es el segundo hayedo-abetal más extenso y mejor conservado de Europa. Un verdadero tesoro natural navarro que cuenta con un gran valor ecológico. Y que alberga diferentes especies que se encuentran protegidas, como son las reservas naturales de Mendilatz y Tristuibartea y la reserva integral de Lizardoia, siendo un espacio perfecto para disfrutar.
Parque del pasatiempo
En Betanzos si queremos hacer ecoturismo tenemos un espacio que se considera una combinación perfecta entre un jardín de recreo y un parque cultural, de estilo enciclopédico. Con su construcción se pretendía dar a conocer distintas culturas del mundo, que aún podemos disfrutar a través de sus grandes paredes y muros, además de parques y fuentes.
Jardín nazarí de Vélez de Benaudalla
En la provincia de Granada podemos encontrar unos preciosos jardines nazaríes, menos conocidos que los de La Alhambra, situados en el municipio de Benaudalla. Conocido como el Jardín de los Sentidos, está catalogado como jardín Histórico entre los bienes de interés Cultural de la Junta de Andalucía. Dado que apenas ha sufrido cambios, es posible hacer ecoturismo y al mismo tiempo apreciar naturaleza, paisajismo e historia en un solo lugar.
Ruta del Flysch
Esta ruta de ecoturismo transcurre en el Geoparque de la Costa Vasca, entre imponentes acantilados que fueron el escenario de la última temporada de Juego de Tronos. Perdernos por ellos, nos permitirán ser testigo de 60 millones de años de historia en la tierra. Y disfrutar de un medio ambiente único y singular.
Bufones de Pría
Este paisaje se encuentra en Llanes, en la parte más salvaje de la costa asturiana, con grandes acantilados rocosos. Pero lo más peculiar de este enclave es lo que se conoce como bufón, grietas en la roca caliza por las que entra el agua del mar provocando expulsiones de agua a gran presión. Todo un espectáculo de la naturaleza que merece la pena conocer.
Jardín botánico de Gijón
Con más de 25 hectáreas de extensión, es el único jardín botánico de Asturias. Aunque se trata de un espacio recreado, está perfectamente diseñado para disfrutar de una experiencia única de ecoturismo, gracias a sus más de 15.000 plantas y árboles. Cuenta con cuatro entornos muy diferenciados, que permiten disfrutar de las delicias de la naturaleza.
Geoparque de Granada
Incluido por la Unesco en la Red Mundial de Geoparques, este entorno ideal para hacer ecoturismo, ya que es capaz de trasladarnos a varias zonas del planeta en una misma localización. Siendo uno de los mejores registros geológicos continentales de los últimos 5 millones de años. Una sucesión semidesértica de decenas de miles de cárcavas y ‘badlands’ rodeados de sierras y las cumbres nevadas de Sierra Nevada, un lugar perfecto para disfrutar a pie, en bicicleta o a caballo.
Torcal de Antequera
Situado en la provincia andaluza de Málaga, el Torcal de Antequera es un espacio único que reúne uno de los paisajes kársticos más espectaculares de toda Europa. Con más de 200 millones de años, cuenta formaciones rocosas con forma de depresiones circulares que se originaron por la acumulación y depósito de sedimentos marinos y la erosión de agentes naturales, dando lugar a este entorno por el que realizar gran variedad de rutas. Todo ello acompañado de una gran biodiversidad. Destacando las aves como el águila real o el halcón peregrino.
