Una de las principales metas de los países es avanzar hacia la sostenibilidad, logrando un equilibrio entre el progreso y el cuidado del planeta y para ello Madrid tiene un ambicioso plan que podría cambiar la historia de España, pero ¿De qué se trata?
En búsqueda del progreso
Los países constantemente tienen el desafío de innovar en la gestión de sus recursos y avanzar hacia un futuro más sostenible y para ello muchas veces se debe recurrir a planes muy ambiciosos y realizar grandes cambios, por ejemplo transicionar a energías limpias.
Las energías renovables son una pieza clave para avanzar hacia el desarrollo sostenible, ya que cada día necesitamos mayores cantidades de energía y no hay nada mejor que obtenerla de fuentes limpias y amigables con nuestro planeta como lo está haciendo Madrid.
En el corazón de la capital española, se está desarrollando un plan ambicioso que redefine la forma en que se genera energía limpia, pero en vez de hacer una construcción desde cero, están haciendo una ingeniosa adaptación que involucra 3700 piezas, pero ¿Qué son exactamente estas piezas?
Las piezas que cambiarán Madrid
Las piezas en realidad son 3770 paneles solares, que serán instalados en una planta fotovoltaica flotante en el depósito inferior de Torrelaguna, pero ¿Qué significa que sea flotante? Básicamente que en vez de instalarse en suelo firme se instalan sobre el agua.
Con una potencia cercana a los 1700 kW, esta planta está diseñada para generar anualmente electricidad suficiente para abastecer a unos 1400 hogares, sin duda un proyecto muy interesante y ambicioso al igual que el coloso de los mares que roba viento.
La superficie que ocupan los paneles alcanza los 12 000 metros cuadrados y es la primera instalación de energía solar flotante en toda la Comunidad de Madrid y según Jesús Urbieta, el jefe del Área de Tecnologías Industriales de Canal, esta infraestructura funcionará como un proyecto piloto.
La idea es evaluar el comportamiento de esta tecnología en un entorno acuático para determinar si es viable aplicarla en otros embalses y depósitos de la región, pero las expectativas son bastante altas pues ya invirtieron 2,1 millones de euros.
Más espacio y más eficiencia
El hecho de que se ubiquen los paneles directamente sobre el agua ofrece dos grandes beneficios, el primero es la conservación del agua ya que al cubrir parte de la se reduce la radiación solar directa disminuyendo la evaporación.
Y por otro lado aumenta la eficiencia energética, pues el rendimiento de los paneles solares se ve favorecido por el efecto refrigerante del agua. Los módulos fotovoltaicos se mantienen más fríos que en instalaciones convencionales en suelo o tejado, lo que les permite alcanzar un rendimiento superior.
De hecho, las estimaciones técnicas sugieren que este tipo de instalaciones pueden lograr hasta un 15% más de eficiencia en comparación con los sistemas tradicionales, especialmente durante los meses más cálidos del verano.
Este es solo el comienzo
Este proyecto forma parte de Plan Solar de Canal de Isabel II, la empresa que se encarga de la gestión de agua en Madrid, pero este es solo el comienzo de un plan mucho más ambicioso que contempla la construcción de más de 30 instalaciones solares en diversas zonas.
El objetivo general del plan es alcanzar una potencia total superior a los 39 megavatios, lo que equivale al consumo energético anual de una población de unos 27 000 habitantes y la inversión estimada para este programa supera los 55 millones de euros.
Con estos avances, Madrid da el primer y gran paso para convertirse en el líder de la energía solar flotante, demostrando que los paneles solares se pueden instalar en lugares que jamás hubiéramos pensado y otra prueba de ello, son los paneles solares adhesivos.