Asociaciones ecologistas piden que se anule la autorización ambiental que se emitió para una macrogranja porcina en el municipio de Monteagudo de las Vicarías, en Soria, que tendría un cupo de 6990 plazas y se asentaría en una Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA).
SEO/BirdLife ha presentado una demanda formal ante el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº 1 de Soria, solicitando la anulación de la autorización ambiental otorgada para la instalación de una explotación porcina de 6.990 plazas de recría de reproductoras en el municipio de Monteagudo de las Vicarías.
Esta granja se encuentra en la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) ES40000363 “Monteagudo de las Vicarias” que se integra en la Red Natura 2000. Se trata de un área que presenta una gran importancia ornitológica, donde se encuentran especies de aves prioritarias para la conservación, vinculadas a los hábitats agro esteparios y acuáticos de la zona.
Entre ellas hay al menos 26 especies de aves protegidas incluidas en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (21) o el Catálogo Español de Especies Amenazadas (5), siendo un área de alimentación, campeo o incluso reproducción, de especies amenazadas como el alimoche común, el aguilucho cenizo, el águila pescadora, la ganga ortega o el sisón común, este último En Peligro de Extinción.
Macrogranja en una ZEPA
Por otro lado, la macrogranja ocuparía uno de los hábitats de interés comunitario de importancia para la fauna y para esta ZEPA, como es el HIC 6220* –Zonas subestépicas de gramíneas y anuales del Thero-Brachypodietea-. Este hábitat prioritario lo encontramos (entre otros sitios) en la vegetación natural al norte de la parcela en donde se pretende construir la explotación.
La organización argumenta que la resolución administrativa para autorizar el proyecto ignora riesgos ambientales graves. El estudio de impacto ambiental, base de dicha autorización, adolece de múltiples errores e incongruencias y omite el análisis detallado de las especies protegidas en el área.
Además, la organización denuncia que el plan de gestión de los purines que generará la macrogranja no evalúa el efecto de estos residuos en los ecosistemas circundantes, lo que podría suponer ignorar impactos en los acuíferos existentes y afectar tanto a la ZEPA de “Monteagudo de las Vicarias” como a las especies amenazadas.
En la demanda presentada por la ONG resalta que estos defectos, junto con la fragmentación del proyecto en varias explotaciones, no han supuesto una evaluación de impacto ambiental adecuada y conjunta de los diversos efectos sinérgicos.
La organización insta a que se retire la autorización para evitar daños irreparables al entorno y a las especies de aves protegidas, resaltando que su protección es un compromiso de conservación a escala europea.
Según David de la Bodega Zugasti, responsable del Programa Legal de la ONG, “La conservación no está reñida con la actividad económica. Existen formas de desarrollo que respetan y protegen la naturaleza y, de hecho, son modelos productivos más sostenibles en el tiempo. Necesitamos proyectos que prioricen estas prácticas frente a modelos intensivos que comprometen la salud del suelo, el agua y el aire».
La organización declaro que tiene un firme compromiso de colaboración con administraciones y sectores productivos para encontrar alternativas que respeten el medio ambiente y sean al mismo tiempo fuente de riqueza, pero eso exige que se cumpla y se refuerce la normativa que protege espacios como la Red Natura 2000, que es una herramienta garantista para preservar la rica biodiversidad de España y Europa.
El espacio en cuestión alberga al menos 26 especies de aves, siendo un área de gran importancia para especies amenazadas como el alimoche común, el aguilucho cenizo, el águila pescadora, la ganga ortega o el sisón común, este último En Peligro de Extinción.
