En 2019, la UE reforzó y fortaleció los componentes de su gestión del riesgo de desastres mediante la mejora del Mecanismo de Protección Civil de la UE. El último elemento introducido fue la reserva de crisis, más conocida como rescEU.
Esta reserva tiene el objetivo de mejorar tanto la protección de los ciudadanos frente a los desastres como la gestión de los riesgos emergentes y es la que España está pidiendo que se active para paliar las consecuencias de los incendios que asolaron el país en agosto.
Petición de reserva de crisis a la UE
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) ha pedido a la Comisión Europea (CE) que active la reserva de crisis para dar respuesta a las comunidades autónomas afectadas por los incendios, que han arrasado este verano hasta 35.400 hectáreas agrarias útiles en todo el país.
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha informado este lunes de que el pasado viernes el Gobierno remitió a la CE la petición formal para la activación de la reserva de crisis, un mecanismo que no se activa de la noche a la mañana, pero que, urgirá a que sea lo antes posible.
En su comparecencia previa a la celebración del consejo consultivo con las comunidades autónomas, Planas ha precisado que lo hizo después de su encuentro con el comisario europeo de Agricultura, Christophe Hansen, durante el consejo informal de ministros de Agricultura de la UE en Copenhague, celebrado la pasada semana.
Planas ha mostrado su esperanza en obtener una pronta respuesta de Bruselas y ha puesto como ejemplo de éxito la gestión de las ayudas para los afectados por la dana del pasado octubre en Valencia, que ya se han completado en su conjunto.
Restaurar la actividad agraria
Según los últimos datos del seguro agrario, en agosto se han notificado 231 siniestros y, aproximadamente, 2.100 hectáreas afectadas de explotación, no de pastos, que en este caso, podrían tener una dimensión superior, ha precisado el titular de Agricultura.
El seguro agrario ha actuado, ha celebrado Planas, que ha añadido los datos de julio de Agroseguro, mes en el que ha registrado un total de 975 siniestros con una superficie de 18.000 hectáreas correspondientes, en su mayoría, a cultivos herbáceos.
Tras un verano en el que han ardido 35400 hectáreas, España necesita la ayuda de la Unión Europea, mediante el mecanismo de reserva de crisis, que se espera que ayude a paliar las pérdidas y a recuperar las áreas forestales y de cultivos. EFE / ECOticias.com