Hace casi diez años, el 24 de mayo de 2015, el Papa Francisco escribía la Encíclica Laudato Sí sobre el cuidado de la casa común y, más cerca en el tiempo, el 4 de octubre de 2023, publicaba la exhortación apostólica Laudate Deum sobre la crisis climática.
Dos textos religiosos que, sin embargo, interpelaron más allá de la Iglesia Católica a miles de personas comprometidas con el movimiento ecologista. Dos textos que tienen un presente y seguramente serán muy recordados en estos días, pero que, sobre todo, tendrán futuro.
Ambos ubicarán a Francisco en ese lugar que poco abunda de quienes se hicieron cargo de su rol en el momento necesario, ya que fue un líder religioso ecologista cuando había que serlo y defendió la idea de la crisis climática y de la lucha contra la contaminación, entre otros temas de corte eco.
Adiós al papa más ecologista
Las agrupaciones ecologistas también han lamentado el fallecimiento del papa Francisco, el pontífice que «alzó la voz» por el medio ambiente, la crisis climática y los más vulnerables frente a los impactos del cambio climático, pensamientos que dejó recogidos en su encíclica «Laudato si» de 2015, texto que actualizó en 2023.
Desde Greenpeace España, su directora, Eva Saldaña, ha trasladado las condolencias de la ONG por el fallecimiento del papa Francisco, «un pontífice con un claro discurso ecologista, defensor del medio ambiente y de la lucha contra el cambio climático y que durante todo su pontificado alzó la voz en favor de la paz y la justicia social».
«Hoy perdemos un importante referente político y moral», ha asegurado Saldaña, quien señala que esperan que su sucesor «recoja el testigo y otorgue continuidad» a la herencia que deja el papa Francisco, tras 12 años de «lucha contra las injusticias sociales, económicas y ambientales en el mundo».
Por su parte, el secretario general de WWF España, Juan Carlos del Olmo, ha lamentado también la muerte del pontífice argentino y ha dicho que fue «uno de los aliados mundiales más influyentes en la defensa de la naturaleza y de la casa común«.
«El papel de las religiones es fundamental en la lucha por la defensa de la naturaleza y su llamada a una ‘ecología integral’ ,donde se relaciona la protección del medioambiente con la justicia social, su crítica al consumismo desbocado o su denuncia ante la inacción de gobiernos y empresas ante el cambio climático que se ceba en los más pobres», ha indicado.
En opinión de Carmen Duce, coordinadora de Ecologistas en Acción, «el papa es un líder espiritual de importancia global y hay que reconocer la claridad con la que desde la publicación de la encíclica Laudato si, en 2015, y después en todos sus años de papado, Francisco ha alzado la voz para alertar de manera muy rotunda de las graves crisis ecológicas por las que atraviesa el planeta. No solamente el cambio climático, sino también las crisis del agua, la pérdida de biodiversidad y la contaminación de las tierras, de los suelos», ha subrayado.
Además, según Duce, el papa Francisco también señaló «con muchísima claridad» como causas de estas crisis «el modelo capitalista extractivista y depredador, que enriquece a unos pocos y condena a la muerte y a la desesperación a millones de personas en todo el planeta».
Desde la ONG, asegura Duce, esperan que su sucesor «también tenga esta claridad y esta valentía» a la hora de denunciar esos modelos y que «utilice su autoridad moral y espiritual para tratar de orientar las decisiones políticas hacia un modelo que ponga en el centro la vida de todas las personas y de todos los ecosistemas». EFE/ECOticias.com