¿Alguna vez pensaste que habría coches que no necesitaran un conductor? Probablemente lo hayas visto en alguna película futurista, sin embargo, ahora la realidad está superando la ficción. Una nueva creación ha llegado a revolucionar la movilidad autónoma pero para sorpresa de muchos no es un Tesla ni un BYD, entonces ¿De quién es esta maravilla?
La innovación nunca se detiene
Los coches eléctricos se han vuelto cada vez más populares, ya que son muy atractivos y no contaminan nuestro planeta, sin embargo, cuando hablamos de un coche eléctrico solemos pensar en Tesla o BYD, pero ¿Qué hay del resto?
No podemos negar que estas marcas son muy famosas, pero eso no significa que sean las únicas del mercado o las únicas que puedan sorprendernos, por eso ahora, una marca ha llegado a revolucionar la forma en que nos movemos.
Se trata de una marca que busca liberarnos por completo del volante, con un vehículo que no solo asiste al conductor, sino que lo reemplaza, abriendo un mundo de posibilidades para lo que podemos hacer mientras viajamos.
Es un invento que va más allá de un simple coche. Es una sala de estar, una oficina, o un espacio de relajación que se mueve por sí solo, transformando por completo la experiencia de transportarse y fue creado por la compañía de inteligencia artificial Tensor.
Un coche sin volantes ni conductor
Si te sorprendió la llegada de los autos voladores, quédate a ver un nuevo lanzamiento que se llama Robocar y es el primer auto 100% autónomo diseñado para el público, con un nivel 4 de autonomía y que se espera que, esté a la venta en 2026.
El Robocar es un vehículo asombroso que se construyó desde cero con el objetivo de ser totalmente autónomo. A diferencia de otros autos a los que se les añaden equipos para que se manejen solos, este coche ya viene de fábrica con toda la tecnología que necesita para ser un coche sin conductor.
Está lleno de tecnología para garantizar tu seguridad en todo momento, como 37 cámaras, cinco sensores LiDAR, micrófonos y sensores ultrasónicos. Su cerebro es un modelo de inteligencia artificial que imita cómo conduce un humano, lo que le permite tomar decisiones por su cuenta.
También cuenta con sistemas de dirección y frenos son dobles, por lo que si uno falla, el otro toma el control de inmediato y diseño interior es tan innovador como su tecnología. La cabina es como una sala de estar sobre ruedas, con pedales que se guardan y un volante que se pliega dentro del tablero.
Pero si es autónomo ¿Qué hay del asiento del conductor? Curiosamente el asiento del conductor se transforma en un espacio de relajación o en una oficina móvil, con una gran pantalla que permite a los pasajeros disfrutar de su viaje sin tener que estar pendientes del camino.
La apuesta de Tensor
Lo que distingue a Tensor de gigantes como Tesla o Waymo es su estrategia, pues mientras que las otras compañías se han enfocado en crear flotas de vehículos autónomos para servicios de transporte, Tensor quiere que los consumidores sean dueños de su propio auto robot.
Esta es una apuesta mucho más difícil, ya que el coche tendrá que adaptarse a cualquier camino, pero si tiene éxito, podría cambiar por completo nuestra idea de lo que significa ser dueño de un auto. Los coches ya no serían solo una herramienta de transporte, sino un espacio personal que se conduce solo.
Sin duda la apuesta de Tensor es muy arriesgada, pero tiene todo el potencial necesario para revolucionar la industria automotriz. Hace poco vimos como Francia convertía coches en generadores y ahora Tensor vuelve a demostrar que la innovación en la industria automotriz no tiene límites y que el sueño de la movilidad autónoma está más cerca que nunca.