Desde que existen los vuelos, su mayor desafío ha sido alcanzar mayores velocidades, poder dar la vuelta al mundo en un par de horas, por supuesto sin exponer a sus pasajeros y aunque pareciera una locura o algo sacado de una película ahora será posible gracias a una nueva innovación. Acá te lo contamos.
Los mayores retos de los vuelos
Con los grandes avances en tecnología hemos visto como los motores son cada vez más rápidos, sin embargo, estas innovaciones suelen limitarse a coches, motocicletas, mientras que la aviación se ha quedado algo estancada, especialmente cuando hablamos de velocidad.
Por supuesto que un avión sigue siendo más rápido que un coche, pero de momento no han logrado superar todas las expectativas, pues muchos sueñan con lograr un viaje de enormes cruzar continentes en un par de horas como en las películas.
Y si bien las velocidades hipersónicas ya se han alcanzado en el ámbito militar y aeroespacial para vuelos no tripulados o misiones espaciales, su aplicación en el transporte comercial de pasajeros sigue siendo un gran desafío, lleno de obstáculos tecnológicos y económicos.
En búsqueda de nuevas alternativas
Los motores de avión de hoy en día tienen un gran problema y es que a velocidades extremas, el aire y el calor se comportan de forma muy agresiva, por lo que alcanzar esas velocidades de película es imposible sin crear motores diferentes.
Sin embargo, una empresa de Houston podría cambiar las reglas del juego, pues ha estado trabajando en un tipo de motor de cohete que promete la eficiencia y el empuje necesarios para impulsar vuelos comerciales a velocidades tan altas como las que veíamos en las películas.
La empresa protagonista de este invento es Venus Aerospace, quienes desarrollaron un Motor de Cohete de Detonación Rotatoria (RDRE), este motor es tan impresionante y revolucionario como el motor que desafía a la Unión Europea.
Pero eso no es todo, el 14 de mayo de este año, Venus Aerospace completó el primer vuelo de prueba exitoso de un RDRE desde suelo estadounidense, un hito que sin duda marca un avance crucial en la búsqueda de vuelos de alta velocidad accesibles.
Un pequeño cohete equipado con este innovador motor despegó desde el Puerto Espacial América en Nuevo México, lo que demuestra que esta tecnología puede tener éxito no solo en experimentos teóricos o condiciones de laboratorio, sino también en vuelo.
Un motor con velocidades hipersónicas
Pero ¿Qué hace que el RDRE sea tan revolucionario? Sucede que los motores de cohetes tradicionales, que queman combustible en una cámara de combustión mediante un proceso constante y controlado, pero el RDRE tiene un sistema muy distinto.
El RDRE utiliza una onda de detonación continua que viaja en círculo dentro de una cámara anular, este método genera una mayor presión y eficiencia en la combustión, lo que se traduce en un mayor empuje con menos combustible.
De hecho, con mucho orgullo, Andrew Duggleby, el director técnico de Venus declaró lo siguiente: «Hemos construido un motor que no solo funciona, sino que lo hace de forma fiable y eficiente, y eso es lo que lo hace escalable».
El éxito del RDRE de Venus Aerospace representa un paso significativo hacia una nueva era en la aviación, en el que la velocidad hipersónica pasa de ser una fantasía a convertirse en una opción viable en el mercado.
Sin duda este avance quedará en la historia de la aviación y si la tecnología se expande, muy pronto podremos disfrutar de vuelos accesible y sostenibles a una velocidad que jamás hubiéramos pensado, lo que nos demuestra que la innovación en motores no se detiene y que siempre se pueden lograr mejores resultados y otra prueba de ello es este motor que quema partículas de agua.