Así, en la Resolución de 21 de noviembre de 2011, de la Secretaría de Estado de Cambio Climático, publicada por el Boletín Oficial del Estado, el MARM concluye que este proyecto «previsiblemente» causaría efectos negativos «significativos» sobre el medio ambiente y considera que las medidas previstas por el promotor «no son una garantía suficiente de su completa corrección o su adecuada compensación».
El objetivo del proyecto era aumentar los recursos disponibles en el sistema Tiétar para satisfacer, por orden de importancia, los regadíos de aguas abajo de la presa de Rosarito (fundamentalmente del cultivo de tabaco), con una previsión de consumo a 10 años de 182,83 hm3/año y a 20 años de 207,22 hm3/año (siendo el actual de 182,65 hm3/año); la demanda ecológica con una previsión de 32,64 hm3/año para cualquier escenario y el abastecimiento urbano, con una previsión de consumo a 10 años de 7,60 hm3/año y a 20 años de 8,43 hm3/año (siendo el actual de 6,81 hm3/año).
Sin embargo, la DIA expone que lo reflejado en el proyecto pone de manifiesto que las deficiencias detectadas en el estudio de impacto ambiental, junto con los impactos ambientales significativos identificados, impide diseñar unas medidas preventivas correctoras o compensatorias adecuadas al proyecto.
Además, concluye que se estima una «afección ambiental negativa significativa y directa del proyecto» tras las distintas consideraciones sobre la evaluación ambiental del proyecto, la protección jurídica de los espacios naturales protegidos afectados, entre los que se encuentran algunos de la Red Natura 2000 y las especies de fauna y vegetación catalogadas con distintos grados de protección.
En este sentido, la organización Ecologistas en Acción ha expresado su «satisfacción» por una decisión que entierra «definitivamente» los proyectos hidráulicos que amenazaban el río Tiétar como el proyecto de recrecimiento de Rosarito o Navalcán o nuevos embalses como el de Monteagudo, así como el trasvase de Tiétar-Navalcán.
«Esta DIA negativa pone punto final a décadas de denuncia ecologista contra la insensata intención de regular aún más el Tiétar con argumentos falaces de riesgo de inundación o de falta de recursos para regadío», ha manifestado Ecologistas en Acción en un comunicado.
Finalmente, valora que el MARM ha hecho «suyos» los postulados ecologistas que defendieron «siempre» la ausencia de justificación de estos proyectos, la falta de valoración de alternativas basadas en el buen uso de los recursos existentes y el elevadísimo impacto ambiental que se produciría en los espacios naturales de la Red Natura 2.000.
Por ello, «comparte su alegría y felicitación» con el resto de alegantes al proyecto que «de forma unánime y rigurosa» han defendido hasta el final los argumentos de defensa de la legalidad y del medio ambiente.
ECOticias.com – ep