El exbaloncestista Yao Ming, todo un héroe deportivo nacional en China, y su esposa, Le Yi, posan con dos crías de pandas en una fotografía cedida hoy por uno de los espacios protegidos de estos osos en Chengdu, en la provincia central de Sichuán, donde se encuentran 37 de las 62 reservas naturales de pandas en China
China es el único país del mundo donde hay osos panda en libertad en su hábitat natural, unos 1.600 ejemplares, una cifra que mantiene la especie en peligro de desaparición, aunque medidas como el ecoturismo local pueden ser de gran ayuda en su conservación. Un artículo publicado en «EFEverde».
El exbaloncestista Yao Ming, todo un héroe deportivo nacional en China, y su esposa, Le Yi, posan con dos crías de pandas en una fotografía cedida hoy por uno de los espacios protegidos de estos osos en Chengdu, en la provincia central de Sichuán, donde se encuentran 37 de las 62 reservas naturales de pandas en China. El gigante asiático es el único país del mundo donde los panda viven en libertad en su hábitat natural, con una cifra de unos 1.600 ejemplares. La especie está en peligro de extinción. Las autoridades chinas y diversas entidades conservacionistas están estudiando la manera en que el ecoturismo podría generar los ingresos necesarios para que estas áreas pudieran ser rentables por sí solas y garantizar así el crecimiento de la cabaña de osos panda hasta que la especie salga del peligro de extinción.
ZHANG ZHIHE
Según explicó a Efe el doctor Zhang Zhihe, director de la Base de Pandas de Chengdu (provincia central de Sichuan), desde que China empezó en 1953 a rescatar pandas salvajes para protegerlos, criarlos en cautividad y reinsertarlos en su hábitat natural, el gigante asiático ha conseguido que su número aumentase en los últimos años.
Si hace unas décadas llegó a haber apenas un millar de pandas en el planeta, el último censo chino de osos en libertad es de 1.596, aunque se elaboró en el año 2004, por lo que se confía en que el número actual sea un poco mayor.
A ellos se suman los 328 pandas que hay en cautividad en todo el planeta, precisó Zhang. «En China tenemos 62 reservas naturales de pandas de nivel nacional, de las cuales 37 están en Sichuan», añadió el científico, cuya base tiene 19 ejemplares alojados actualmente en el extranjero, incluidos los cuatro que hay actualmente en el Zoo de Madrid.
NÚMEROS PRECARIOS
Con todo, el número de pandas en libertad es aún «muy precario y muy bajo», y aunque, tras tres o cuatro décadas de protección del animal, su población está repuntando, «para cualquier especie es un número muy pequeño» que implica riesgos, ha indicado a Efe el fundador de la ONG estadounidense WildAid, Peter Knights. «Cuando tienes una población tan baja como ésa, la especie es muy vulnerable a las enfermedades, que pueden reducirla muchísimo», explicó Knights, lo que se complica por la reducción de su hábitat natural, los bosques de bambú que han acabado siendo reservas por la urbanización china.
Para proteger a estos animales es necesario aumentar ese hábitat y «entrenar a los pandas que han nacido en cautividad para que puedan sobrevivir en la vida salvaje», lo que supone «un proceso caro», admitió.
ECOTURISMO
«Por eso estamos viendo las posibilidades del ecoturismo en torno a los pandas, que permitiría utilizar los ingresos obtenidos en su conservación y además generar dinero para las comunidades locales», que serían así las primeras interesadas en su cuidado, señaló.
En China la idea apenas está comenzando, «pero en muchos lugares del mundo ha funcionado, como en las islas Galápagos, en Ecuador, donde el turismo genera millones de dólares para la conservación» de la biodiversidad, y donde WildAid tiene también programas. «China tiene en los pandas un activo único que no tiene nadie más en el mundo: es el único país donde puedes ver pandas en libertad, y creo que en el futuro la gente estará dispuesta a pagar cada vez más por disfrutar de esta experiencia aquí en China», concluyó Knights.
“PAMBAJADORES”
WildAid y la Base de Pandas de Chengdu comparten desde 2010 una campaña mundial de imagen para reclutar «pambajadores», jóvenes de todo el mundo que, durante un año, son formados en el cuidado de los osos, conviven con ellos y sus cuidadores en China y luego difunden lo que han aprendido.
La segunda ronda de búsqueda de «pambajadores» fue representada a finales del año pasado en Shanghái, con el apoyo del exbaloncestista Yao Ming, todo un héroe deportivo nacional en China, y sus organizadores esperan superar las 60.000 solicitudes que recibieron en la primera edición. «El programa tuvo un impacto muy importante y exitoso en China y en todo el mundo», cuyo eco llegó a casi 80 países, comenta Zhang, quien cree que la campaña les ayudará cada vez más a «concienciar a la gente sobre la situación de los pandas y por qué es importante conservarlos».
EFEverde
OPINIÓN
¿Clonación o ecoturismo?
No hay color…
Los osos panda casi no se reproducen en cautividad por razones diversas, entre ellas la falta de apetito sexual. A finales de 2002 se anunciaba el desarrollo en Pekín del «Proyecto de Clonación de Osos Panda», pero hasta la fecha no parece haber dado sus frutos. Y mejor que haya sido así. El presunto “éxito” de una iniciativa así podría haber creado más problemas que soluciones. Mientras, las organizaciones internacionales también trabajan para ayudar a su conservación, pero con métodos más naturales. WWF desarrolla en China varios proyectos con pandas, como por ejemplo actividades de ecoturismo para que los habitantes de la región no tengan que trabajar en los bosques habitados por esta especie amenazada destruyéndolos. Asimismo, la UNESCO declaraba recientemente Patrimonio de la Humanidad la región de Sichuan, en la que vive alrededor de un tercio de esta especie. Sería bueno, así mismo, que China, tan dura para algunas cosas, creara legislaciones con duras penas contra los que trafican con su piel, por ejemplo. Y, también, contra los que explotan los bosques y sus riquezas sin ningún tipo de decoro medioambiental ni sostenibilidad.
EcoActivistas