El spa de las ballenas jorobadas. El ecólogo marino Dr. Olaf Meynecke, del Programa de Investigación de Ballenas y Clima dirigido por Griffith y del Centro de Investigación Costera y Marina, usó etiquetas de ventosa para rastrear las ballenas que migran hacia el sur entre agosto de 2021 y octubre de 2022.
Las etiquetas CATS están equipadas con video de alta definición integrado. Además de un sistema de liberación de magnesio, un transmisor VHF para la recuperación, magnetómetros, un hidrófono. Y sensores de luz, presión, temperatura y GPS.
Utilizando los datos y las imágenes recopiladas de las etiquetas, pudo observar a las ballenas realizando giros completos y laterales a una profundidad de agua de hasta 49 m. Y esto lo hacían en el fondo del mar, que estaba revestido con arena fina o escombros.

“En todas las ocasiones en que rodaron por la arena, se observó en video que las ballenas se movían lentamente hacia adelante. Con la cabeza primero en la arena y luego rodaban hacia un lado o giraban completamente”, dijo el Dr. Meynecke.
“Durante los diferentes despliegues, se observó el rodar de la arena, siempre dentro del contexto de la socialización. El comportamiento seguía al cortejo, la competencia u otras formas de contacto social.
Limpieza de ‘cutis’
«Así que creemos que las ballenas se exfolian usando la arena. Para ellas es una ayuda con la muda, que les permite la eliminación de ectoparásitos como el percebe. Y para hacerlo seleccionan específicamente áreas adecuadas del medio ambiente marino para este comportamiento».
En aguas tropicales y subtropicales, los percebes se adhieren a las ballenas en sus primeras etapas de vida. Y las ballenas necesitan eliminar dichos percebes con cierta frecuencia para evitar el crecimiento excesivo. Puesto que conservarlos les acarrea una pérdida de energía y de maniobrabilidad de arrastre.
“Las ballenas jorobadas albergan diversas comunidades de bacterias de la piel que pueden representar una amenaza para las heridas abiertas si las bacterias crecen en grandes cantidades”, dijo el Dr. Meynecke.
“Quitar el exceso de piel es probablemente una necesidad para mantener una comunidad saludable de bacterias en la epidermis. Las ballenas jorobadas pueden eliminar algunos percebes y la piel a través de la actividad superficial, pero no todas”.
Se observó que la piel de las ballenas se caía durante el proceso de frotamiento contra el fondo marino. Y qué, peces como el jurel plateado juvenil se alimentaban activamente de los restos de la dermis de las ballenas. Un comportamiento común en la naturaleza, que se asemeja mucho a las denominadas “estaciones de limpieza” de los arrecifes de coral.
Acerca del estudio
La investigación Ballenas exfoliantes Comportamiento de contacto con el fondo arenoso de las ballenas jorobadas, fue asistida por Sea World Research and Rescue Foundation y financiada por el Programa de Investigación de Ballenas y Clima. Y se ha publicado en Marine Science and Engineering. El spa de las ballenas jorobadas.