La humanidad se ha desarrollado gracias al agua, siempre cerca de grandes ríos, humedales o fuentes de agua dulce. El acceso al agua ha provocado guerras y conflictos, incluso actualmente los provoca.
Hoy celebramos el Día Mundial del Agua. Este año, la ONU ha decidido usar el lema “no dejar a nadie atrás”. A pesar de que el acceso al agua es un derecho fundamental reconocido por la ONU, para millones de personas tener agua de calidad y en cantidad suficientes es un lujo que no se pueden permitir. Concretamente unos 4.000 millones de personas (casi dos tercios de la población mundial) padecen escasez grave de agua durante al menos un mes al año.
La humanidad se ha desarrollado gracias al agua, siempre cerca de grandes ríos, humedales o fuentes de agua dulce. El acceso al agua ha provocado guerras y conflictos, incluso actualmente los provoca. Y no solo en lejanos territorios. En España existen conflictos por el agua alimentados por la mala gestión que hacemos de ella, véase el caso del trasvase Tajo-Segura, entre otros.
A pesar de ser un país mediterráneo acostumbrado a periodos de sequía y escasez, en España vivimos como si fuéramos una superpotencia hídrica. Pero, además, tenemos el dudoso honor de ser merecedores de varios récord en cuanto a cuestiones hídricas. Más de un millón de pozos ilegales extraen el equivalente en agua al consumo de 118 millones de personas. Estas extracciones están esquilmando nuestras futuras reservas estratégicas de agua.
Somos el país de Europa con mayor número de embalses y azudes. Ello ha provocado una grave segmentación y artificialización de la mayor parte de nuestros ríos. Y, por si fuera poco, la poca agua que nos queda la estamos contaminando gravemente con vertidos urbanos, agrícolas e industriales, acumulando año tras año sanciones de Bruselas por este motivo.
En resumen, en este Día Mundial del Agua de 2019 nos queda mucho por hacer y por cambiar, dado que son grandes los retos que España tiene por delante en materia hídrica. De lo contrario, nos encaminamos a padecer en un futuro cercano lo que millones de personas ya sufren en el mundo: no tener agua.
Para más información: Greenpeace