La Séptima Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEA-7) se ha consolidado como un espacio crucial para impulsar soluciones urgentes que permitan avanzar hacia un planeta más resiliente, justo en un momento en que las crisis climática, de biodiversidad y de contaminación se intensifican a escala global.
Uno de los ejes centrales de UNEA-7 ha sido la necesidad de acelerar la implementación de políticas ambientales vinculantes, especialmente en torno a la reducción de plásticos, la transición energética y la gestión sostenible de recursos naturales.
En este sentido, la Asamblea refuerza la idea de que ningún país puede enfrentar por sí solo los desafíos ecológicos que se atraviesan actualmente.
UNEA-7 reúne a ministros y líderes para acelerar la acción global
La VII Asamblea de la ONU para el Medio Ambiente (UNEA-7), principal organismo de toma de decisiones ambientales del mundo, intentará el próximo diciembre en Nairobi impulsar «soluciones sostenibles para un planeta resiliente», afirmó este viernes la directora ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), Inger Andersen.
«La UNEA-7 se lleva a cabo en lo que sabemos que es un mundo geopolítico frágil y en constante cambio. Y, por eso, (…) su lema ‘promover soluciones sostenibles para un planeta resiliente’ es aún más importante que nunca», afirmó Andersen en una rueda de prensa en la capital de Kenia, donde tiene el PNUMA su sede central.
Más de 3.500 delegados debatirán 19 resoluciones ambientales clave
La reunión, que se celebrará del 8 al 12 de diciembre en el complejo de la ONU en Nairobi, acogerá a «más de 60 ministros y un gran número de viceministros, y a más de 3.500 delegados«, adelantó la jefa de la agencia medioambiental de las Naciones Unidas.
Se espera que el presidente de Kenia, William Ruto, intervenga en el segmento de alto nivel, que se desarrollará el 11 de diciembre, junto a otros jefes de Estado, señaló el PNUMA, sin facilitar los nombres de esos mandatarios.
Un total de 19 borradores de resoluciones y decisiones -que versan sobre asuntos como la lucha contra incendios forestales, la sostenibilidad medioambiental y los sistemas de inteligencia artificial, la preservación de los glaciares o la dimensión mediomabiental de la resistencia antimicrobiana- serán «presentados a los países para su debate y negociación», señaló Andersen.
Las resoluciones de la Asamblea, que integra a los 193 Estados miembros de la ONU, no son legalmente vinculantes, pero se consideran un primer paso significativo en el camino hacia acuerdos ambientales globales y la formulación de políticas nacionales.
La reunión, que se celebrará del 8 al 12 de diciembre en el complejo de la ONU en Nairobi, acogerá a «más de 60 ministros y un gran número de viceministros, y a más de 3.500 delegados».
La directora ejecutiva advirtió de que la reunión tendrá lugar en un momento en el que los datos del PNUMA «muestran que los impactos ambientales y climáticos se están acelerando e, incluso, intensificando«.
«El aumento de las emisiones -subrayó- está provocando olas de calor récord. La naturaleza y los ecosistemas están desapareciendo en todo el mundo y estamos presenciando la contaminación tóxica de nuestro aire, agua y energía solar. Estas son amenazas globales que afectan a todos los países (…) y que exigen soluciones».
Andersen dijo que entiende la «frustración» que genera «el ritmo y la escala de la acción multilateral» en el terreno ambiental.
«Por eso -enfatizó- la UNEA-7 se centrará en cómo podemos fortalecer el multilateralismo para lograr una acción unida e inclusiva en todos los ámbitos, lo que llamamos la triple crisis planetaria: la crisis del cambio climático, la crisis de la pérdida de biodiversidad y la crisis de la contaminación y los residuos«.
«Y estas crisis están interconectadas», agregó la jefa del PNUMA, que intervino junto a la ministra keniana de Medio Ambiente, Cambio Climático y Silvicultura, Deborah Mlongo Barasa, quien abogó por «un multilateralismo efectivo y no diálogos prolongados».
Nairobi será epicentro mundial de las negociaciones climáticas 2025
«Juntos, impulsemos soluciones sostenibles que ayuden a asegurar un planeta resiliente para las generaciones actuales y futuras», añadió la ministra.
La presidencia de la UNEA-7 recae en Omán, representado en la reunión de Nairobi por Abdulá Bin Ali Al-Amri, presidente de la Autoridad Ambiental de ese país de la península arábiga.
«Juntos, impulsemos soluciones sostenibles que ayuden a asegurar un planeta resiliente para las generaciones actuales y futuras».
La Asamblea también impulsa la adopción de nuevas iniciativas multilaterales para promover la economía circular, la gestión responsable de sustancias químicas y la conservación de ecosistemas críticos. Con estos acuerdos, UNEA-7 busca sentar las bases de una respuesta global más cohesionada y poderosa.
En conclusión, UNEA-7 reafirma que la resiliencia planetaria solo será posible mediante una acción colectiva, urgente y sostenida, orientada a equilibrar el bienestar humano con la salud del medioambiente. Seguir leyendo en EFE / ECOticias.com














