Antinutrientes más comunes. Ya hemos hablado acerca de qué son los antinutrientes y de cómo proceder, para aprovechar sus beneficios y evitar sus inconvenientes. Esta es una lista de algunos de los antinutrientes más comunes y dónde encontrarlos.
Taninos
Los taninos, presentes en muchas semillas y frutos (uvas, membrillos), son un tipo de inhibidor enzimático, que puede causar deficiencia de ciertas proteínas y problemas gastrointestinales. Las enzimas son imprescindibles para metabolizar adecuadamente los alimentos y generar los nutrientes, que necesitan las células. Las moléculas de taninos pueden inhibir su función y causar hinchazón, diarrea, estreñimiento, etc.
Oxalatos
Los oxalatos se encuentran en mayor cantidad en las semillas de sésamo, soja y en el mijo negro y marrón. De acuerdo con varias investigaciones de la capacidad de absorción de los aminoácidos de plantas, su presencia hace que las proteínas vegetales (especialmente las que proceden de las leguminosas) resulten poco absorbibles.
Lectinas
Una de las características más importantes de las lectinas (productos lácteos, los granos crudos y legumbres preparadas de manera inadecuada) es, que son capaces de sobrevivir a la digestión que se realiza a nivel del tracto gastrointestinal. Esto implica que, pueden penetrar en las células que lo recubren y dañar las paredes del epitelio. Además de interferir con la digestión y la absorción de nutrientes.
Saponinas
Estos anti nutrientes, presentes en muchos granos (que deben lavarse antes de emplearse para eliminarlas, como es el caso de la quinoa) actúan de manera similar a las lectinas, afectando al revestimiento gastrointestinal.
Esta situación contribuye a padecer y trastornos autoinmunes y el llamado “síndrome del intestino permeable”. Son particularmente resistentes al proceso digestivo y pueden ingresar al torrente sanguíneo, desde donde desencadenan respuestas inmunitarias. Antinutrientes más comunes.
Inhibidores de la tripsina
Los inhibidores de tripsina y de la quimotripsina se encuentran en la mayoría de granos y de los productos derivados, como los cereales, las gachas de avena y hasta los alimentos para bebés. La cocción puede degradarlos, pero aun así pueden provocar deficiencias de minerales en niños, bebés y en aquellas personas, cuya función pancreática esté reducida.
Isoflavonas
Estos antinutrientes del tipo poli-fenólico se encuentran en la soja, en cantidades muy altas. Son capaces de causar cambios hormonales y contribuir al padecimiento de problemas digestivos. Las isoflavonas pueden ser beneficiosas, pero están clasificadas como fitoestrógenos y tienen una alta capacidad de disrrupcion endocrina. Lo que significa que, su exceso puede llevar a experimentar cambios perjudiciales, en los niveles de las hormonas.
Solanina
Se encuentra en las verduras de la familia de las solanáceas, como los pimientos, las berenjenas y los tomates. Y su presencia, en general, resulta beneficiosas para la salud. El problema es que en niveles muy altos y si una persona tiene una sensibilidad especial a este antinutriente, puede desencadenar una sintomatología similar al envenenamiento. Y provocar dolores de cabeza, calambres estomacales, náuseas, diarrea, vómitos, ardor de garganta y mareos.
Chaconine
Se encuentra en el maíz, las patatas y en la mayoría de las plantas solanáceas antes mencionadas. Tiene propiedades antimicóticas, por lo que, en dosis moderadas, resulta muy saludable. En algunas personas puede causar problemas digestivos. En especial cuando se consume, en grandes cantidades y/o crudos. Antinutrientes más comunes.