¿Qué alimentos nos ayudan a quemar grasa¿Cuáles son más beneficiosos para nuestra salud Descubre las respuestas aquí.
Todos los años lo mismo. Después de las navidades nos sentimos tan culpables que el primer propósito para después de Reyes es perder peso. Pero en la mayoría de los casos no hace falta ponerse a dieta. Basta con llevar una alimentación un poco más sana, lo que incluye incrementar la ingesta de frutas y verduras y reducir las grasas.
Alimentos “quema-grasas” naturales
Lo ideal para limpiar nuestro organismo estos días es optar por alimentos “quema-grasas” naturales. Con eso no queremos decir que vayas a perder peso de una forma milagrosa (para asesorar de dietas de adelgazamiento están los endocrinos), sino que contribuyen a evitar la acumulación de líquidos y acelerar el metabolismo. Todos ellos pueden ser la base para llevar una alimentación sana si se consumen con moderación.
1. Lentejas. Una porción de esta legumbre aporta el 35% de las necesidades diarias de hierro, un nutriente esencial para el buen funcionamiento de nuestro organismo.
2. Té verde. Además de acelerar el metabolismo tras su ingesta, es diurético y posee un alto contenido de sustancias antioxidantes.
3. Café verde. Menos conocido que el anterior, este producto no deja de ser café común no tostado. Es antioxidante y aseguran que contiene propiedades adelgazantes.
4. Lácteos (mejor desnatados o bajos en grasas). Aportan calcio y vitamina D.
5. Huevos. Los estudios han revelado que comer uno o dos al día no influye en el aumento del colesterol. Es más, aportan las proteínas necesarias y son ricos en vitamina B12.
6. Carnes magras (pollo, pavo, conejo o solomillo de ternera, por ejemplo). Durante la digestión de las proteínas quemamos aproximadamente el 30% de las calorías ingeridas.
7. Pescado. Podemos aplicar los mismos beneficios que en el caso anterior y añadir los ácidos grasos, como el Omega 3, presentes en especies como el salmón, el atún, la caballa, los arenques o el pez espada. Por su parte, la merluza, el lenguado o el bacalao fresco son magros y es fácil encontrarlos en la pescadería.
8. Arroz, pasta, cereales y harinas integrales. Sirven como fuente diaria de energía y nuestro cuerpo quemará el doble de calorías que si los consumimos refinados. Además, sacian más y contienen nutrientes esenciales como fibra, vitamina E y B6, cinc y magnesio.
9. Frutos secos. Sobre todo almendras y nueces. Son saciantes, buenos para el corazón y tienen menos calorías que otros snacks.
10. Vegetales verdes. Las espinacas (es uno de los vegetales con más proteínas) o las acelgas, por ejemplo, son bajos en calorías pero altos en fibra y vitamina E. En este grupo también hay que incluir el brócoli, la lechuga romana, la rúcula, los berros, la escarola o las hojas de mostaza. Todos ellos son muy ricos en vitaminas, minerales y nutrientes esenciales.
11. Otros vegetales: La col, el repollo, la colifror, el apio, el pepino, la remolacha, la calabaza, el calabacín, los espárragos, las zanahorias o las endivias (contienen casi un 95% de agua) son otros vegetales que debemos incluir en nuestra dieta. Mención especial merece el rábano. Este vegetal tiene alto contenido en fibra y agua, mientras que apenas tiene calorías.
12. Alimentos que aportan vitamina C. Contribuyen a procesar las grasas más rápido, como el caso de las siguientes frutas y verduras:
– Brócoli: Además es rico en vitaminas A y D, ácido fólico y tiene propiedades antioxidantes.
– Pimientos: En todas sus variedades, incluido el chile, cayena o pimiento rojo picante.
– Kiwis.
– Cítricos: la naranja, el limón, la mandarina o el pomelo son claros ejemplos de frutas con poder antioxidante y poco azúcar.
– Sandía y melón: sacian el hambre y la sed gracias a su alto contenido en agua. Ambos contienen muchos nutrientes y vitamina D.
– Manzanas: Contiene una gran cantidad de pectina, por lo que tiene efecto depurativo. En general todas las frutas contienen esta sustancia (limones, naranjas, mandarinas, arándanos, grosellas, frambuesas, uvas y membrillos, entre otros).
13. Jengibre. Esta raíz es muy conocida por sus propiedades antiinflamatorias y digestivas.
No podemos olvidarnos tampoco de beber mucha agua, cocinar con aceite de oliva y hacer ejercicio periódico. Si además optamos por alimentos orgánicos, libres de químicos, el beneficio para nuestro cuerpo será aún mayor.