Noruega quiere reducir 100 kilos de CO2, pero lanzará dos bombas para eso

Publicado el: 17 de noviembre de 2024 a las 10:00
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En este último tiempo, creció la preocupación por las emisiones de CO2 provenientes de las plantas industriales que son las principales causantes de la contaminación y el calentamiento global.

Hace años se está tratando de reducir de alguna manera la huella de carbono de estas grandes plantas, pero nadie daba en el clavo con ninguna solución. Se había intentado fabricar distintos aparatos que permitieran capturar el CO2, sin embargo la mayoría de ellas siempre eran criticadas por sus altos costos y su dificultad.



Es por esto que todos los miembros de la comunidad científica se alegraron tanto al escuchar esta noticia: desarrollaron una nueva tecnología que podría capturar las emisiones de carbono de las plantas industriales, pero con una significativa reducción en los costos y una mayor eficiencia. Esta podría ser una gran solución para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.

Encontraron una solución para reducir las emisiones de CO2 de manera sostenible y más eficaz

Una empresa de investigación de Noruega, llamada Stiftelsen for industriell og teknisk forskning (SINTEF), diseñó una tecnología que podría capturar CO2 de los gases de escape de las grandes plantas industriales. Esto lo haría mediante un reactor llamado «Reactor de Adsorción de Oscilación Continua (CSAR)«.



Este reactor utilizaría no una bomba, sino dos: una de calor y una de vacío y su objetivo principal será captar el CO2 de los gases de escape, de la manera más eficiente y menos costosa posible. Explican que podría llegar a capturar hasta 100 kilogramos de CO2 al día.

Cómo capturar las emisiones de CO2 de las plantas industriales

El funcionamiento de este reactor sería el siguiente: primero se unirá al CO2 con un material absorbente que lo dejará atrapado en un reactor con bajas temperaturas, desde allí se liberará el calor que pasará al segundo reactor. En ese segundo paso, con un aumento de temperatura, se liberará el CO2 que fue captado previamente. Las bombas que utiliza el reactor CSAR hacen posible este traspaso de calor.

“La acción combinada de lo dos reactores hace que la transferencia de calor sea muy eficiente y también es la razón del bajo consumo de energía involucrado en esta tecnología”, explicó el científico investigador de SINTEF, Jan Hendrik Cloete.

Se llegó a la conclusión de que estos reactores serían muy eficientes debido a que utilizan únicamente energía renovable y se demostró que son compatibles con las plantas industriales, ya que han demostrado buenos resultados en las pruebas realizadas en la Planta de Gestión de Residuos BIR AS en Bergen, Noruega, donde se procesan unas 220.000 toneladas de basura y asimismo se liberan unas 250.000 toneladas de CO2.

Así fue como SINTEF confirmó que los reactores estaban aptos para ser utilizados en las plantas industriales para capturar las emisiones de carbono. Además, se confirmó que se espera que para el 2030, se capturen 100.000 toneladas de carbono al año, en la Planta de Gestión de Residuos BIR AS.

La capacidad de las bombas para lograr su cometido

“Nuestros estudios han demostrado que la tecnología CSAR compite muy bien con las tecnologías que utilizan calor, sobre todo si se dispone de electricidad procedente de fuentes renovables a un precio razonable”, indicó Jan Hendrik Cloete.

«Después de 100 horas de funcionamiento, descubrimos que podíamos capturar la misma cantidad de CO2 de los gases de escape reales que en nuestras pruebas de laboratorio. Este fue un paso importante porque confirmó que el concepto CSAR también funciona a escala industrial. También ayudó a aumentar la confianza en nuestras estimaciones económicas«, también expresó el científico de SINTEF.

Gracias a estas iniciativas, estamos cada vez un paso más cerca de nuestro objetivo como sociedad: poder vivir en armonía con la mayor cantidad de energías renovables que se puedan para tener un planeta menos contaminado y con menos emisiones de carbono.