Al parecer las aves fueron atraídas por el calor y la luz de la llama procedente de la torre de escape de la planta de Canaport
Aproximadamente 7.500 aves, algunas de ellas en peligro de extinción, murieron en Canadá cuando sobrevolaban una planta de gas natural licuado, según informaron medios canadienses.
El incidente se produjo en la planta Canaport, situada en Saint John, provincia de Nueva Brunswick, cuando miles de aves migratorias fueron incineradas por una llamarada procedente de la instalación.
Al parecer las aves fueron atraídas por el calor y la luz de la llama procedente de la torre de escape de la planta de Canaport, que tiene una altura de 30 metros. Las llamaradas son producto del sistema para mantener la presión en la planta mediante el quemado de cantidades excedentes de gas natural.
La terminal de Saint John recibe gas natural licuado de barcos y la planta devuelve al producto su forma gaseosa, un proceso llamado regasificación.
El gas natural es distribuido por gasoductos a mercados en Canadá y Estados Unidos.
Vía | lahora.com.ec