Después de las fallidas negociaciones con la dirección del grupo eólico Gamesa, su plantilla en Peralta ha acordado iniciar una huelga indefinida a partir del próximo martes 24 de noviembre, al finalizar el plazo para acordar las condiciones del traslado a los 40 operarios de este centro de consolidación.
La compañía no prorrogará en enero el alquiler de la nave de Peralta y repatriará a sus empleados entre los centros de Ágreda y Tudela, con peores condiciones laborales y de salario. Según fuentes sindicales, la empresa ha aceptado algunas modificaciones tales como indemnizar con 45 días por año a quienes no quieran reubicarse o no se adapten en un año al nuevo puesto y aumentar a 800 euros la compensación por el cambio de jornada, entre otras. La huelga afectará sobre todo a una veintena de trabajadores que se encuentran en convenio.