Este año 2012 supone una oportunidad para que España avance en la reducción de los niveles de pobreza energética a nivel nacional y para que colabore también con los países en desarrollo.
Reconociendo la importancia de la energía para el desarrollo sostenible, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el año 2012 Año Internacional de la Energía Sostenible para Todos mediante la Resolución 65/151.
Este año 2012 supone una oportunidad para que España avance en la reducción de los niveles de pobreza energética a nivel nacional y para que colabore también con los países en desarrollo.
Además es una ocasión para profundizar en la toma de conciencia sobre la importancia de incrementar el acceso sostenible a la energía, la eficiencia energética y el uso de las energías renovables en el ámbito local, nacional, regional e internacional.
1.400 millones de personas carecen de acceso a la energía moderna porque no pueden pagarla principalmente, y 3.000 millones dependen de la biomasa tradicional y del carbón como las principales fuentes de energía tanto para cocinar como para calefacción. Los servicios energéticos tienen un profundo efecto en la productividad, la salud, la educación, el cambio climático, la seguridad alimentaria e hídrica y los servicios de comunicación.
Esta falta de acceso a la energía no contaminante, asequible y fiable obstaculiza el desarrollo social y económico y constituye un obstáculo importante para el logro de los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
