El corredor del hidrógeno del Ebro. Su objetivo es generar valor sostenible en forma de beneficios medioambientales, sociales y económicos, desarrollando un proyecto pionero de cooperación público-privada e interterritorial y multisectorial que aprovecha las sinergias y complementariedades existentes entre ellos para la descarbonización de la economía y el transporte, y para el desarrollo de capacidades tecnológicas e industriales locales.
El Corredor del Hidrógeno del Ebro promoverá acciones en todos los ámbitos, incluida la producción, transporte, usos y almacenamiento. En cuanto a la producción de hidrógeno renovable, este ecosistema se ha marcado la ambición de instalar una capacidad de producción de 400 MW en 2025 (lo que conlleva 1,5 GW de producción de generación renovable asociada), y alcanzar 1,5 GW en 2030 (6 GW de renovable).
Otra de sus líneas clave de actuación se centrará en estimular los usos finales del hidrógeno renovable, tanto en el sector del transporte como en usos industriales de distintos sectores. Entre estos empleos destaca el objetivo de alcanzar una producción de 250.000 toneladas anuales de productos derivados del hidrógeno renovable como el metanol, el amoniaco o los combustibles sintéticos en 2030.
También impulsará la creación de una red con 20 hidrogeneras en 2025, infraestructura que contará con hasta 100 puntos en 2030, para posibilitar el despliegue de su uso en el transporte terrestre, marítimo y ferroviario.
Además, en materia de almacenamiento y transporte de hidrógeno renovable, se impulsarán proyectos transfronterizos con el sur de Francia para favorecer la interconexión con Europa y posicionar a España como un productor relevante en el mercado del hidrógeno continental. Se realizará de manera coordinada con la Comunidad de Trabajo de los Pirineos.
Vector energético
El hidrógeno renovable es uno de los principales vectores energéticos para alcanzar la descarbonización de la economía gracias principalmente a su versatilidad. Ya se usa hidrógeno en el sector industrial como materia prima en el refino, en la producción de amoniaco, en la industria del acero y en la química, principalmente. Todos estos productos tendrán menos huella de carbono gracias al hidrógeno renovable.
Pero este gas tiene también otros múltiples usos. Es en sí mismo un combustible limpio, en movilidad se utiliza en la producción de combustibles sintéticos o en pilas de combustible y también puede emplearse para almacenar energía renovable, solventando así la intermitencia de la producción eólica y solar fotovoltaica. El corredor del hidrógeno del Ebro.