Después de siglos, España finalmente conquista el mar. Tiene una táctica infalible para tomar todo lo que tiene para ofrecer. Sorprende tanto como el monstruo flotante de 150 MW sobre el mar descubierto a 12.000 km de España. El agua es uno de los recursos más preciados que tiene el ser humano, especialmente el agua potable.
Es vital para el correcto desarrollo de la vida humana y la prosperidad de las sociedades. No obstante, la Organización Mundial de la Salud reporta que unas 2.200 millones de personas no tienen acceso a ella. El incremento de la demanda, el agotamiento de fuentes de agua dulce y el cambio climático están complicado el escenario global, además de ejercer presión.
Frente a este desafío, el océano se ensalza como una fuente potencia de agua potable a través de procesos como el de la desalinización. El sistema mencionado elimina la sal y otros minerales del agua del mar. Durante mucho tiempo, se ha visto como una solución más que prometedora para abordar el problema de la escasez de agua dulce, pero ya no es la única.
España tomará toda el agua del mar para acabar con la sed
DesaLIFE aparece en el momento más necesario. Se trata de una solución innovadora para producir agua potable en Gran Canaria, haciendo uso de la energía de las olas como fuente principal. Esta iniciativa europea busca desalar agua de mar a través de un método que no requiere electricidad de la red. De esta manera, contribuye a la sostenibilidad y descarbonización de la zona.
El proyecto lleva el sello de la startup Ocean Oasis y la colaboración de la Plataforma Oceánica de Canarias (PLOCAN), el Instituto Tecnológico de Canarias (ITC), la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) y la consultora Elittoral.
La financiación de 5,9 millones de euros, cuyo capital proviene de la Agencia Ejecutiva Europea de Clima, Infraestructuras y Medio Ambiente (CINEA), ha permitido que se disponga de un presupuesto total que roza los 10 millones de euros para el desarrollo de los próximos cinco años.
DesaLIFE, la tecnología con la que España planea derribar la sequía
La tecnología DesaLIFE está basada en un sistema de boyas flotantes dispuestas para extraer agua del mar y procesarla bajo ósmosis inverso sin recurrir al consumo de electricidad. Un sistema innovador que derivará en una generación de hasta 2.000 metros cúbicos diarios de agua potable, cantidad suficiente para brindar suministro a unas 15.000 personas.
El abastecimiento producido quedará integrado en la Estación Desaladora de Agua de Mar (EDAM) Arucas-Moya, ubicada en el área norte de la isla. Antes de alcanzar esta etapa, el equipo del proyecto llevó adelante pruebas con la boya experimental GAIA, que lleva ejerciendo su actividad en el puerto de Las Palmas desde 2024.
Este sistema piloto permitió un refinamiento de la tecnología y la posibilidad de asegurar su viabilidad a gran escala. Vía comunicado, el director de PLOCAN, José Joaquín Hernández Brito, subrayó que “la transición energética en Canarias es urgente”. Además, enfatizó el compromiso del organismo con todas las propuestas familiarizadas con la sostenibilidad.
Un menor impacto ambiental es un gran aliciente, pero no el único para reparar en DesaLIFE. También supone una gran oportunidad para el crecimiento económico de la región. La instauración de este sistema llamará la atención de inversores extranjeros, producirá trabajo en el sector de las renovables y ayudará a colocar a Canarias como un auténtico referente tecnológico respecto a la gestión de agua.
Después de siglos, España ha logrado conquista el mar ensalzando un lugar tan estratégico como Gran Canaria. Un escenario que se suma a esta masa de energía bajo el mar que llega a España: viene de Portugal, funciona con agua y es infinita.
