A mediados de mes de abril se inició la precampaña forestal. Durante este tiempo, los bomberos ya han llevado a cabo actuaciones de prevención, que ahora se ampliarán al máximo con la entrada de los meses de más calor y de peores perspectivas.
Las tareas preventivas de la campaña se llevan a cabo en tres zonas de cobertura básicas de la sierra de Collserola, donde se realizan recorridos diarios:
- Parque de Vallvidrera, entre la zona del Turó del Forat del Vent y la carretera de Santa Creu d’Olorda.
- Parques de la Vall d’Hebron y L’Eixample, en los entornos de la carretera de las Aigües, la carretera de Vallvidrera y los barrios de la vertiente norte del túnel.
- Parque de Sant Andreu, en la zona de la carretera Alta de les Roquetes, Torre Baró, la carretera del Cementiri y Ciutat Meridiana.
La campaña contra incendios comienza con ‘buen pie’
La campaña de vigilancia y prevención de incendios forestales en el área metropolitana de Barcelona ha empezado esta semana con unas condiciones meteorológicas, de riesgo de fuego y de las masas forestales «bastante positivas».
Así lo explica el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) en un comunicado emitido este jueves, donde apostilla que estas «buenas perspectivas» no deben significar «relajarse», por lo que es necesario «mantener el esfuerzo de vigilancia, comunicación y coordinación» entre los diferentes cuerpos de vigilancia y con la ciudadanía.
Las condiciones favorables en la vigilancia de incendios forestales, que generan «más optimismo» que las de los últimos veranos, se deben a unas temperaturas «habituales para la época» y a las precipitaciones abundantes de esta primavera, principalmente. De hecho, la precipitación acumulada hasta este 15 de mayo ha sido de más de 300 mm en algunos puntos de la Serra de Collserola, lo que supone que ya se ha alcanzado un 60 % de la lluvia media anual.
Esta «nueva coyuntura», explica el AMB, ha traído una mejora en el estado de la vegetación y un peligro de incendio bajo, tendencia presente prácticamente en todo 2025 en la Serra de Collserola: este año, se han producido cinco fuegos, frente a los nueve registrados para estas mismas fechas de 2024.
Ante esta perspectiva positiva, el periodo de vigilancia activa empezará a principios de junio y el dispositivo se reforzará hasta septiembre, temporada en la que se prevé el máximo riesgo de incendio. La función de este dispositivo, que estará activo en los 36 municipios metropolitanos y lo coordina el Consorcio del Parque Natural de la Serra de Collserola, es vigilar activamente el territorio y alertar de columnas de humo.
Sobre la campaña del verano pasado, el AMB considera que fue «una de las mejores» de los últimos años, con 40 conatos de incendio -comienzo de un fuego, que no se llega a consumar– en toda la zona metropolitana de Barcelona, frente a los 71 detectados en 2023.
En 2024, la principal causa de incendio fueron las presuntas negligencias, con 12 fuegos relacionados, mientras que diez no tuvieron origen conocido; nueve fueron presuntamente intencionados, seis causados por accidente, dos siguen bajo investigación y uno fue por causas naturales. EFE / ECOticias.com



















