La pesca de arrastre de fondo es un problema que cada año se agrava un poco más. Lo dice un informe que analiza las horas de arrastre de fondo aparente en áreas marinas protegidas en siete países, entre ellos España. Por esa razón, Oceana y otras ONGs ambientales lanzan una campaña para denunciar la pesca de arrastre de fondo en áreas marinas protegidas europeas
Un informe sobre la pesca de arrastre de fondo
Las áreas marinas protegidas españolas se vieron afectadas por la pesca de arrastre de fondo 460.000 horas entre 2015 y 2023. La flota española es la que acumula casi la totalidad de la actividad y la zona protegida Sur de Almería-Seco de los Olivos es el área que encabeza el ranking de horas, mientras la zona Sistema de cañones submarinos de Avilés es la que tiene más superficie arrastrada. Estos datos se desprenden de un nuevo informe que revela que este método de pesca destructiva tiene lugar en el 90% de las áreas marinas protegidas (AMPs) europeas.
Este informe coincide con la publicación de un dictamen científico histórico por parte del Consejo Internacional para la Exploración del Mar (CIEM), que demuestra que el cierre del 30% de las aguas de la UE del Mar del Norte, el Mar Céltico y el Mar Báltico a la pesca de arrastre de fondo tendría un impacto socioeconómico pequeño para los pescadores y considerables beneficios para los ecosistemas marinos.
La científica marina de Oceana en Europa, Silvia García, explica que “los resultados del análisis desvelan, de nuevo, la magnitud de la pesca de arrastre de fondo en España, que afecta negativamente al estado del océano y a los pescadores. España sigue ignorando la normativa vigente permitiendo esta forma de pesca destructiva en áreas marinas protegidas. Si quiere cumplir sus objetivos de protección del mar para 2030, España debe prohibir la pesca de arrastre de fondo en enclaves protegidos de una vez por todas.”
Horas y horas ‘permitidas’ de pesca de arrastre de fondo
El informe, del que son coautores Marine Conservation Society, Oceana y Seas At Risk, muestra que, en los siete países europeos analizados se permitieron 4,4 millones de horas de pesca de arrastre de fondo aparente en AMPs entre 2015 y 2023, lo que equivale a más de 500 años de pesca de arrastre.
A partir de los datos recopilados por Global Fishing Watch, se calcularon la amplitud y las horas de actividad pesquera en España, Dinamarca, Alemania, Irlanda, Países Bajos, Portugal y Suecia. Los Países Bajos tienen el mayor número de horas de pesca de arrastre registradas en las AMPs estudiadas, seguidos de Alemania, Dinamarca y España.
Para revertir esta situación, destacadas ONGs ambientales, entre ellas Oceana, han lanzado una campaña para que los Estados Miembros, como España, prohíban la pesca de arrastre de fondo en sus áreas marinas protegidas.
Las ONGs se han unido a Only One, una plataforma digital dedicada a la protección del océano, para publicar un mapa interactivo que revela el alcance de la pesca de arrastre de fondo aparente en áreas marinas protegidas a nivel europeo. Con ello, las organizaciones instan a la Comisión Europea a prohibir la pesca destructiva, como el arrastre, en todas las áreas marinas protegidas de la Unión.
En la actualidad, el Plan de Acción Marino de la UE pide a los Estados que establezcan planes nacionales para retirar la pesca de arrastre de las AMPs, en línea con la normativa vigente. El primer plazo para presentar las hojas de ruta nacionales venció a finales de marzo, pero hasta ahora solo unos cuantos países han cumplido. De momento, es difícil saber si alguno de ellos ha hecho públicos sus planes, tal como solicitó la Comisión Europea.
Una actividad nefasta para los ecosistemas, la biodiversidad y el medio ambiente
La pesca de arrastre de fondo consiste en que uno o varios barcos arrastran pesadas redes por el fondo del océano para capturar peces y otras especies marinas, como gambas. Se trata de uno de los métodos de pesca más destructivos, ya que provoca la pérdida de ecosistemas, la liberación de CO2 almacenado en el lecho marino y elevados niveles de capturas accidentales y descartes.