BYD ha cobrado cada vez más liderazgo en la industria automotriz, por lo que no es de extrañarnos que cada vez circulen más coches de la marca, sin embargo, ahora tienen otros planes para expandirse a tal punto que podrían llegar a inundar nuestro planeta.
El gran liderazgo de BYD
La demanda de coches aumenta todos los días, pues en una era tan tecnológica, tener un coche se ha vuelto casi como una necesidad básica y a medida que más personas quieren comprar un coche, más empresas quieren ser parte de la industria automotriz.
En un principio, parecía que la industria sería dominada por Estados Unidos y Europa, pero con el tiempo, el liderazgo de China se fue volviendo innegable y sus marcas llegaron a superar incluso a los gigantes como Tesla gracias a los coches eléctricos.
Y como era de esperarnos, la ambición de China no va a detenerse, pues su meta es inundar el planeta con sus productos y para lograrlo, la protagonista será BYD, una de las marcas chinas más prestigiosas del ultimo tiempo.
Sin embargo, todos esperaríamos que esos planes incluyeran un trabajo extenso, donde la marca no descansara, pero la realidad está siendo todo lo contrario, pues la compañía ha reducido turnos de noche y ha bajado la capacidad de producción en más de un tercio.
Estas acciones contradicen la lógica de crecimiento y abren una serie de teorías donde muchos piensan que BYD puede estar pasando por una mala racha y que su plan de crecimiento se fue a pique, mientras que otros piensan que en realidad hay un secreto detrás de esta estrategia.
El secreto detrás de BYD
Mientras BYD baja sus ventas otras marcas venden coches cada 2 minutos, pero la principal razón detrás de la desaceleración de BYD es un problema crítico de exceso de inventario, ósea tenían muchos coches guardados.
Aunque la empresa hizo grandes descuentos, las ventas no subieron como esperaban, pues BYD quería crecer un 30% en 2025, pero el crecimiento en mayo, fue de apenas un 0.2%, el más bajo en más de un año.
El problema era muy visible así que los concesionarios le pidieron a BYD que dejara de enviar tantos coches, así que la empresa tuvo que disminuir su producción para corregir este problema y evitar que toda su cadena de distribución se viera afectada.
Sin embargo, la disminución de la producción no es un sinónimo de fracaso ¡es todo lo contrario! Pues tienen una estrategia mucho más ambiciosa, donde BYD dirigirá su enfoque hacia una expansión internacional más calculada.
China tiene todo calculado
El plan ya no es solo vender coches en el extranjero, sino establecer una presencia global real, de hecho, la compañía ya ha exportado cerca del 20% de sus 1.76 millones de vehículos vendidos en lo que va del año, una cifra significativa que demuestra su creciente apuesta por otros mercados.
Para llevar a cabo su plan, BYD ya está tomando medidas concretas, comenzando por Europa, donde está construyendo su primera fábrica de coches eléctricos en Szeged, Hungría, que empezará a producir a finales de 2025.
¡Y eso no es todo! También están construyendo nuevas fábricas en Turquía y planea triplicar la cantidad de tiendas para vender sus coches en Sudáfrica para el año 2026, así que todo indica que China ya tenía todo calculado.
Su objetivo sigue siendo dominar el mercado global de vehículos eléctricos, pero ahora la forma de lograrlo ha cambiado radicalmente, pasando de una estrategia de producción a gran escala a una de expansión global calculada y sostenible.
Sin duda la producción de BYD ha disminuido, pero eso no significa que estén fracasando, pues todo indica que tienen un plan ya calculado donde se expandirán a nivel mundial y al parecer China seguirá liderando la industria automotriz, de hecho, hasta Ferrari quiere copiarle a las marcas chinas.