Una legendaria marca de supercoches está sorprendiendo al mundo entero con sus decisiones. Se está despidiendo definitivamente de la gasolina. En la actualidad, cuando se habla del “combustible del futuro”, el imaginario colectivo viaja mentalmente hacia nuevas opciones de combustible, no a la gasolina o al diésel. Alternativas han demostrado su valía durante décadas. Sin embargo, su alta huella ambiental impide que puedan verse como combustibles óptimos a largo plazo. La mira está puesta en la sostenibilidad, que parece estar dejando de lado la gasolina.
Esta marca de supercoches deja de lago la gasolina
Tras darse a conocer el microreactor capaz de ofrecer 160 millones de litros diarios de combustible, ha salido a la luz una de las decisiones más cruciales del sector automotriz. Porsche ha suprimido de su catálogo dos míticos modelos de motor de gasolina.
El fabriante no se ha desligado completamente de los motores a combustión. Sí ha dado un importante paso que ha retumbado en la industria. Durante décadas, todas las personas que buscaban un vehículo deportivo de Porsche por debajo del mítico Porsche 911 solo tenían dos caminos: el Porsche 718 Boxster y el Porsche 718 Cayman.
La era de los motores de combustión está acercándose a su fin. Por su parte, la firma alemana ha confirmado el cierre de los pedidos globales. Esto quiere decir que los últimos ejemplares disponibles solo pueden encontrarse en ciertos concesionarios con stock.
La decisión no llega a ser una sorpresa para todos los seguidores de la marca. Desde hace años, sesabía que tanto el Porsche Boxster como el Cayman podían salir pronto del catálogo. En gran parte, por la estrategia de electrificación de Porsche y por las crecientes regulaciones en diversos mercados.
A principios del año pasado, ambas piezas fueron retiradas de Europa por no cumplir con las normas de ciberseguridad vigentes, una actualización que la empresa consideró inviable para mantenerlas en venta. Aunque Porsche le puso el cierre al libro de pedidos, no ha expuesto con precisión cuándo se detendrá por completo la producción de estos deportivos.
Según datos de Autocar, la construcción de las piezas ya solicitadas podría ampliarse hasta el año que viene. Un escenario que transforma a los últimos Boxster y Cayman en modelos muy valiosos. Podrían llegar a verse como piezas de colección en el futuro.
Pero los nombres pronto podrían volver a la oferta de Porsche, ya que trabaja en las versiones completamente eléctricas del Boxster y del Cayman.
La supermarca de coches Porsche despide dos piezas de gasolina: ya está preparando su versión eléctrica
El formato eléctrico de estas piezas ya está en fase avanzada de pruebas. Podrían llegar el año que viene. Diversos prototipos se han fotografiado en varias ocasiones en carreteras y circuitos, calmando la ansiedad de los entusiastas.
Lo que se sabe hasta ahora es que estas nuevas generaciones brindarán variantes de un motor con tracción trasera y de dos motores con tracción total, aunque la firma todavía no ha expuesto cifras de potencia, autonomía ni tiempos de carga.
De acuerdo al estilo de Porsche y lo percibido hasta ahora, deberían superar las prestaciones de los modelos salientes. Ahora una duda se cierne sobre los aficionados a Porsche.¿Las versiones eléctricas lograrán la misma popularidad que las de combustión?
El dilema de Porsche con sus coches eléctricos
Estos cambios presentan un nuevo desafío ante la marca. ¿Será posible conserva la esencia de su conducción? Esa característica de los 718. Por que un gran número de amantes de Porsche adquieren sus unidades por el salvaje rugido de sus motores.
Rasgo que podría ser complicado de replicar en un tren motriz eléctrico. Frente a este escenario, la marca de supercoches está dispuesta a llevar adelante las acciones necesarias para que la nueva experiencia llegue a la altura de sus estándares históricos.
La legendaria marca de supercoches Porsche sorprende al mundo despidiendo la gasolina de sus modelos de coches Porsche Boxster y Cayman. Despide una etapa de más de un cuarto de siglo de historia. Al mismo tiempo, abre un nuevo capítulo decisivo. Mientras esto sucede, China crea el motor del futuro.