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Aseguran tener la respuesta allí: La solución a uno de los grandes problemas de Europa y el mundo

Publicado el: 2 de septiembre de 2025
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Europa
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Europa pronto podría decir adiós a uno de sus mayores problemas. De hecho, ya tendríamos la respuesta frente a nuestros ojos. Es de público conocimiento que la forma de movilizarnos está cambiando. Cuando alguien va a comprar un vehículo no lo hace pensando únicamente en su diseño o rendimiento. Además, busca que contamine lo menos posible. La sociedad, las empresas e incluso el sector público ya comprenden la importancia de cuidar el medioambiente.

Uno de los mayores problemas de Europa, ¿solucionado?

Tras la aparición de los camiones de dos cabezas, el sector del transporte pesado comenzó a ver la “luz detrás del túnel”. Aunque una nueva información podría aclarar aún más el panorama. Uno de los mayores problemas de Europa y del mundo entero radica en la descarbonización con los camiones de carga.

Alexander Vlaskamp, CEO de MAN, asegura haber encontrado la forma de hacerlo. Y no solo eso. De que sea rentable. En una entrevista con Business Insider, ha asegurado que un camión eléctrico podría amortizarse en dos años y medio. Aunque no sin condicionantes.

Han de estar presentes tres aspectos indisolubles: energía más barata y predecible, peajes que premien la descarbonización y cargadores de muy alta potencia. MAN se declara a sí misma una compañía bien posicionada para la ampliación de la electromovilidad. Sus camiones eléctricos llevan meses trabajando con clientes.

La producción en serie dio inicio en junio de 2025. Alexander asegura que es el fabricante de pesados eléctricos que más crece en Europa en el último semestre. Además, acumula más de 700 pedidos firmes.

Movilidad eléctrica en Europa: ¿por qué es tan difícil descarbonizar el transporte pesado?

El ejecutivo afirma que el cuello de botella no radica en los vehículos, sino en la red de recarga. MAN exige que los operadores y administraciones agilizan la instalación de puntos de 3 megavatios tanto en bases logísticas como corredores.

Resulta complejo planificar operaciones y renovar flotas a varios años vista sin potencia y localizaciones claras. En simultáneo, el directivo solicita acción política para que la electromovilidad pueda mantenerse. Medidas de esta categoría podrían ser el mantenimiento y aplicación sin retrasos de la exención de peajes para camiones eléctricos hasta 2031.

Adicionalmente, podría reinventarse al menos la mitad de la recaudación anual por peajes, alrededor de 7000 millones de euros, en infraestructura y programas de apoyo. Programas que podrían poner un énfasis especial en las pymes.

Sería fructífera la fijación de un precio industrial de la electricidad para el transporte que ubique el kWh entre 0,20 y 0,30 euros. Esto frente a los 0,45 y 0,50 euros habituales en puntos públicos. La figura de autoridad también defiende que el camión eléctrico puede amortizarse entre 2,5 y 3 años, en contraposición con uno de diésel equivalente.

¿Qué pasa con los autobuses de Europa?

En materia de autobuses, MAN está muy avanzada. Más de 2500 urbanos eléctricos se mueven por Europa y agregan una cantidad superior a 100 millones de kilómetros. Su desempeño pone de manifiesto la madurez del producto y una red de servicio capaz de mantener flotas exigentes.

Incluso al sur de Europa, MAN asegura haber ganado notoriedad y recuperado clientes frente a sus rivales asiáticos.

Sumado a esto, la compañía invierte desde hace años en sistemas de conducción automatizada. Desde su punto de vista, ve viable una implantación ampliada de 3 a 5 años, siempre que el marco legal y las inversiones en red y digitalización de la infraestructura avanzan a un ritmo óptimo.

No obstante, el directivo reparó en las exigencias de CO2 de la UE. Sus solicitudes obligan a hacer una reserva de sus recursos financieros. Escenario que ralentiza el progreso. De ahí, que demande una estrategia europea coordinada que deje de lado las dependencias tecnológicas externas.

Si bien MAN pone gran parte de su atención y trabajo en el camión eléctrico, también explota tecnologías alternativas. Entre ellas, destaca el motor de combustión de hidrógeno. Pieza que logra aprovechando plataformas derivadas de los actuales motores de metano y diésel. Así es como la reconocida marca pondría fin al gran problema de Europa y el mundo: la descarbonización del transporte pesado. En paralelo, China asegura que ya no reporta más camiones a combustión.