Este es el coche capaz de hacer la fotosíntesis: un modelo experimental que el hidrógeno teme

Publicado el: 22 de abril de 2024 a las 09:30
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Coche fotosintesis

Llega lo nunca visto en el sector automovilístico: un coche capaz de hacer la fotosíntesis. Aún es un modelo experimental, pero el hidrógeno ya está temblando ante su llegada. El vehículo que fusiona hidrógeno y un motor eléctrico podría quedar obsoleto después de esto.

Antes de pasar a explicar más sobre este innovador automóvil, conviene recordar en qué consiste la fotosíntesis. En términos generales, cuando se habla de fotosíntesis se hace referencia a un proceso biológico hecho por las plantas para conseguir energía de la luz solar. Sucede mediante el intercambio de dióxido de carbono y oxígeno, donde la energía luminosa se transforma en energía química.



Etimológicamente, la palabra se compone de dos: “foto” (que significa luz) y “síntesis” (en referencia a la producción). Suele realizarse en seres vivos autótrofos, como plantas, algas y algunas bacterias, capaces de sintetizar su propio alimento. Pero ¿cómo puede aplicarse este proceso a los coches? ¡Vamos a verlo!

La fotosíntesis se hace presente en este coche

Un equipo de investigadores de la Universidad de Cambridge (Reino Unido) ha creado una tecnología que imita el proceso de la fotosíntesis para transformar CO2, agua y luz solar en combustibles sintéticos multicarbono (etanol y propanol) en un solo paso.



Estos combustibles líquidos todavía están en fase experimental, pero podrían ser toda una revolución en el sector, tanto que podrían dejar a un lado el fanatismo por el hidrógeno. Disponen de una alta densidad energética, además de que pueden almacenarse y transportarse de manera muy fácil.

Además, pueden emplearse directamente en cualquier automóvil de combustión o en gasolineras sin ninguna adaptación.

Hace años que se trabaja en el desarrollo de combustibles sintéticos

Según informa Nature Energy, el equipo del Departamento de Química Yusuf Hamied, lleva años desarrollando combustibles sintéticos cero emisiones tomando como base dióxido de carbono, agua y luz solar. Para hacerlo posible, usan unos dispositivos a los que llaman “hojas artificiales” y siguen un procedimiento, que, de alguna manera, imita a la fotosíntesis que hacen las plantas.

Por ahora, los expertos solo han podido fabricar sustancias químicas simples con este sistema como sintegás o syngas: un combustible gaseoso que llega a partir de la mezcla de H y monóxido de carbono y se utiliza para producir combustibles, productos farmacéuticos, plásticos y fertilizantes, entre otros géneros.

Un catalizador permite que el coche tenga un gran avance

En la actualidad, la utilización de un catalizador a base de cobro y paladio del equipo ha permitido la llegada de sustancias químicas más complicadas, como etanol y propanol en un solo paso. Esto sin tener que generar gas de síntesis en una instancia previa.

Los investigadores señalan que ambos alcoholes se tratan de combustibles renovables de alta densidad energética que “pueden transportar y almacenarse fácilmente, además de que pueden utilizarse directamente en motores de combustión e infraestructuras de servicio”. Reemplazan a los combustibles fósiles más famosos como los combustibles drop-in, que están en auge.

Aunque esta tecnología todavía no ha logrado salir del laboratorio, los investigadores ya mencionados podrían estar a punto de dar un paso de gigante.

El coche que hace la fotosíntesis es único, pero hay que esperar

En los últimos años, otros científicos han producido sustancias químicas parecidas usando energía eléctrica, pero esta es la primera vez que se generan sustancias químicas tan complejos con una ‘hoja artificial’ empleando solo energía solar. Estos combustibles solares son cero emisiones netas de carbono y 100% renovables.

El coche capaz de hacer la fotosíntesis podría estar mucho más cerca de lo que creemos gracias a este modelo experimental. Solo hace falta esperar un poco para ver hasta dónde llega este sistema. Mientras tanto, el hidrógeno sigue ganando terreno, con proyectos como el de las carreteras de hidrógeno.