La movilidad eléctrica cae rotundamente y las ventas conspiran con mejorar la estructura de recarga. El cambio que se está produciendo en el mundo entero, pasando de motores de combustibles derivados del petróleo a sistemas de movilidad eléctrica, muestra nuevas facetas de la industria hasta ahora desconocidas. Por un lado, revela hasta qué punto el sistema electrificado puede satisfacernos, pero, por otro deja entrever que las piezas eléctricas todavía necesitan de un despliegue de puntos de recarga, ayudas en la compra y simplificación administrativa.
Desde el punto de vista conceptual, el transporte o traslado de pasajeros de forma ecológica es buena causa. Sin embargo, en toda transformación, especialmente en una de grandes dimensiones como esta, existen pérdidas. Por ejemplo, para recurrir a modelos eléctricos, la industria debe dejar de lado las infraestructuras anteriores y apostar por nuevas y costosas tecnologías.
La humanidad está frente a una decisión importante: el paso definitivo a una nueva forma de propulsión. El objetivo impuesto por diferentes gobiernos persigue ahorrar la contaminación provocada por los escapes de los vehículos. Siguiendo esta misma línea, los proyectos de parques eólicos, parques solares y centrales hidroeléctricas han aumentado para cubrir la nueva demanda de energía que se avecina.
La movilidad eléctrica cae: los alarmantes números podrían desembocar en una mejora de la estructura
Sin embargo, la movilidad eléctrica no está creciendo al paso que se pronosticaba. Los expertos creen tener claro por qué la moto y el coche eléctrico pierden fuelle, especialmente en España. Europa atraviesa por un “bajón eléctrico” tras un par de años en los que parecía que ese mercado ascendía.
No obstante, los últimos registros de ventas reflejan una clara crisis. La electromovilidad no termina de prosperar, un panorama parecido al presentado por la desaceleración del autoconsumo. Por ahora, no parece haber soluciones para implementar a corto plazo. Solo Moto de Mundo Deportivo tuvo una conversación con Laura Gonçalves, directora general de Powerdot para España, quien otorgó claridad sobre el tema.
Cabe destacar que Powerdot es una de las compañías proveedoras de servicios de recarga rápida para vehículos eléctricos de mayor y más rápida extensión de España. “Es cierto que, en nuestro país, la adopción de la electromovilidad no ha despegado tan rápido como esperábamos. Las matriculaciones de vehículos eléctricos e híbridos enchufables en 2023 representaron el 26% en Francia, 31% en Portugal y en España sólo el 12%”, matizó la experta.
Respecto a los puntos de recarga de acceso público, advirtió que están “experimentando un gran crecimiento”. Según ANFAC, en España existen alrededor de 32.400, un 60% que el año pasado.
“Por otro lado, el parque de eléctricos ha aumentado en un 50% en el mismo período. Por lo tanto, este último año se han intensificado las puestas en marcha de puntos de recarga, creciendo incluso un 10% más que el mercado de vehículos eléctricos”, apreció.
Datos sobre la movilidad eléctrica en España 2024
En junio de 2024, las matriculaciones de turismos completamente eléctricos bajaron casi un 3%, con un total de 5.684 unidades si lo comparamos con 2023. Pero Laura Gonçalves repara en que, a cierre del primer semestre, ascendieron un 1,2% hasta llegar a las 25.864 unidades matriculadas. Poniendo los datos en contraste, las compras de vehículos eléctricos puros por canal particular aumentaron un 11,8% en junio, acumulando un crecimiento del 9,3% a cierre del primer semestre.
Así, casi la mitad de las matriculaciones totales de eléctricos puros son ejecutadas por un particular. Esta tendencia positiva puede explicarse a partir de tres factores: una evolución favorable en la reducción del precio de vehículos eléctricos (a través de ofertas competitivas por precios bajo el umbral de los 40.000 euros), la introducción de nuevas medidas incentivadores (por ejemplo, la reducción del IPRF en un 15% y programas gubernamentales como el Plan MOVES III) y el propio pasar del tiempo y la aclaración de algunos mitos extendidos sobre el coche eléctrico.
Aunque las ventas de la movilidad eléctrica no vayan tan rápido como a los expertos les gustaría, muchos lo tienen claro: ha llegado para quedarse.












