Renault ha lanzado el coche eléctrico neo-retro, una pieza nostálgica y moderna, pero con un elemento inesperado. Sorprende incluso más que el motor futurista que lanzó la propia compañía francesa. Con el objetivo de avanzar hacia el futuro, Renault ha decidido mirar hacia el pasado y reinventar conceptos que ya fueron un éxito, como el R4, R5, Scenic y Mégane. Estos modelos regresan al mercado en forma de vehículos completamente eléctricos, adaptados a las exigencias globales de sostenibilidad.
Esta estrategia muestra una creciente electrificación del sector automotriz y la necesidad de la empresa de competir con la fuerte presencia de fabricantes chinos, que se han introducido en mercados clave como Europa y América Latina. El Renault 5 y el Renault 4 son ejemplos destacados de la estrategia de la firma, ya que ambos vehículos hicieron historia y ahora regresan con versiones eléctricas cimentada en la innovadora plataforma Ampere.
Un sistema que no solo brinda versatilidad, sino que también minimiza el impacto ambiental del vehículo. En estos momentos, Renault se enfrenta a una competencia feroz, especialmente por parte de las marcas chinas que están afianzando su mayordomía en Europa y América Latina, dos mercados esenciales para el fabricante francés.
Renault lanza un coche eléctrico diferente: un modelo neo-retro que encanta a los fanáticos de la marca
El Renault 4 causó sensación en su lanzamiento del año 1961. Eclipsó el mercado como el primer turismo de la marca con tracción delantera y un piso plano debido a la ausencia del túnel de transmisión. Con esta estructura, conquistaba practicidad, la cualidad que se convertiría después en su sello de identidad. Produjeron más de 8 millones de unidades y lo comercializaron en más de 100 países. España fue uno de sus mercados más importantes desde 1963, con unas proyecciones comerciales muy buenas debido a la baja tasa de motorización de ese entonces.
Su éxito dio como resultado una próspera etapa industrial para la factoría de FASA Valladolid, que logró asumir un 10% de su producción mundial (alrededor de 800.000 unidades). Ahora, como ya sucedió con Renault 5, este legendario utilitario retorna como Renault 4 E-Tech, adaptado a los tiempos actuales. El Salón de París fue elegido como testigo del debut de este vehículo eléctrico que promete formar una dupla invencible con el 5 E-Tech.
Además de presentarse como eléctricos asequibles, tienen la apelación de sentimientos y la evocación al pasado a su favor. Este modelo tiene una longitud de 4,14 metros; una anchura de 1,80 metros; una batalla de 2,62 metros; un peso de 1.140 kg; una capacidad de maletero de 420 litros; transmisión automática de una velocidad; 300 km de autonomía urbana; 400 km de autonomía confort y una velocidad máxima de 150 km/h.
En cuanto a motorizaciones, cuenta con un motor eléctrico síncrono de rotor bobinado de 120 CV o 150 CV. Asimismo, dispone de una batería de ion litio de 40 kWh (autonomía urbana) o 52 kWh (autonomía confort).
La gran sorpresa del nuevo coche eléctrico
El modelo Renault 4 E-Tech será fabricado en la planta que la firma tiene en la localidad francesa de Maubeuge, que pertenece a su polo de producción eléctrica ElectriCity. Se presentará en los concesionarios en 2025 con tres versiones: la básica Evolution, la intermedia Techno y la más completa Iconic. Las dos últimas podría solicitarse con el techo de lona opcional Plein Sud.
Estos acabados se entremezclan con dos opciones mecánicas de motor y batería. Por un lado, está la variante ‘Autonomía Urbana’ con 120 CV y 300 km de autonomía y, por otro, la variante ‘Autonomía Confort’, que usa el motor más potente y la batería de mayor capacidad.
En definitiva, Renault ha lanzado un coche eléctrico modelo neo-retro. Se trata de una pieza nostálgica y moderna con el elemento inesperado de que no utiliza combustible. Un hito significativo para la compañía que se une al furor causado por el el Renault Scénic E-Tech 100% eléctrico.