La economía, el empleo o la salud de la población han estado tradicionalmente ligadas a su entorno. Las jornadas que comienzan hoy en Toledo tienen como objetivo lograr un consenso entre economía y conservación, una perspectiva que en España aún siembra cierta desconfianza, pero que en otros países ha demostrado ser un importante motor de desarrollo. WWF y SEO/Birdlife muestran durante estos días que naturaleza y desarrollo no son incompatibles, todo lo contrario: protegiendo la biodiversidad puede aumentarse la riqueza de una región y de sus habitantes.
El agua, el aire, la tierra, las plantas o los animales que habitan en una zona forman una estructura que permite al hombre beneficiarse de agua y aire limpio, alimentos, medicinas, cobijo, combustible, trabajo y ocio. Para WWF y SEO/BirdLife, si se rompe el equilibrio, y se deterioran estos servicios que nos aporta la naturaleza, se deteriora irremediablemente la vida del ser humano.
De este modo, Natura 2000 es una herramienta para alcanzar no sólo objetivos ambientales sino también de bienestar económico. Así, la Ley de Desarrollo Sostenible del Medio Rural, busca mantener la actividad y la calidad de vida en el medio rural, mientras se conservan los recursos naturales, estableciendo como zonas prioritarias las áreas integradas dentro de Natura 2000.
Las dos organizaciones han reunido a representantes de distintos sectores que debatirán el modo de integrar las actividades humanas en estas zonas de especial valor ecológico. Dos ejemplos claros que se presentarán en las jornadas son la Reserva pesquera de Os Miñarzos, en Galicia, y la producción arrocera de Riet Vell, en el delta del Ebro. En los 3 años de andadura de la reserva pesquera se ha conseguido proteger las especies amenazadas y aumentar la cantidad y calidad de las especies comerciales, mejorando la renta de los pescadores. En la cosecha ecológica de Riet Vell se protege el medio ambiente de una forma que resulta muy rentable económicamente para las comunidades locales. Así, estas jornadas pretenden rebatir la idea errónea de que la protección de los espacios y la economía están enfrentados, tal y como subrayó WWF en el informe Mitos sobre la red Natura 2000.
SEO/BirdLife aprovecha la celebración de estas jornadas para presentar una nueva versión de un manual práctico, para las administraciones regionales y locales, que sirve de guía paso a paso para la elaboración de estos planes de gestión. El documento ha contado con la participación de un gran número de expertos que, a través de talleres específicos, han diseñado las distintas medidas que deben aplicarse, dependiendo de las amenazas concretas en cada espacio natural.


















