El macho y la hembra son capaces de alternar las sílabas de su canto tan rápido y con tal exactitud que da la sensación de que se trata de un solo individuo el que está trinando. Un grupo de expertos de Estados Unidos y Ecuador publica en el último número de Science esta curiosa investigación.
El trabajo muestra que el cerebro de estas aves es capaz de procesar el contenido total del canto, no solo la parte que le corresponde a cada miembro de la pareja. Los científicos han comprobado que las hembras aparentemente son las que marcan el ritmo de la ‘pieza musical’ y nunca se equivocan al interpretarla, en cambio, los machos ocasionalmente cometen errores durante el canto.