Las organizaciones ecologistas consideran un auténtico fraude el intento de obtener de la Unión Europea más de 10 millones de euros para financiar un supuesto proyecto de reintroducción de osos en los Pirineos cuyo presupuesto supone en realidad poco más de cuatrocientos mil euros.
Las organizaciones ecologistas denuncia la estrategia del Ministerio y de varias Comunidades Autónomas que amparándose en la justificación de proteger especies emblemáticas, en este caso el oso pardo, tratan en realidad de obtener recursos económicos de Bruselas para cubrir gastos ordinarios de sus propias administraciones, principalmente gastos de personal.
A sabiendas que la Unión Europea solamente financiará proyectos novedosos para la conservación de especies emblemáticas, después de haber invertido ya a lo largo de los últimos años decenas de millones en otros programas de conservación, el nuevo proyecto pretende la reintroducción de osos en el Pirineo español, en un principio procedentes de la Cordillera Cantábrica. Pero el Gobierno de Asturias, que mantiene la única poblaciones viable de esta especie en España ya ha comunicado que no permitirá la captura de osos en su territorio.
Pese a ello, el Ministerio ha remitido la propuesta del programa multimillonario a Bruselas sin definir de dónde podrían venir los osos a reintroducir en el Pirineo, lo que genera serias dudas de si el programa finalmente sería llevado a cabo aunque fuese aprobado por Bruselas. Más cuando el presupuesto para llevar a cabo la acción principal, la reintroducción de osos, representa solamente el 3,45% del total del proyecto de 14 millones de euros.
El resto del presupuesto, es repartido entre Administraciones públicas y empresas públicas con cantidades multimillonarias como es el caso de la Comunidad de Castilla y León, que sería beneficiaria a través de la Fundación pública Fondo Patrimonio Natural con casi 3 millones de euros.
Sin embargo, Castilla y León mantiene a la población osera que ocupa sus territorios en el área oriental de la Cordillera Cantábrica en una situación crítica de extinción, pese a que a lo largo de los últimos años ha recibido subvenciones millonarias de otros proyectos similares de la Unión Europea destinados también a proteger al oso.
Las organizaciones ecologistas denuncian esta estrategia de las administraciones, central y autonómicas para utilizar a las especies emblemáticas que existen en España, como herramientas de financiación, con fondos que se destinan la gran mayoría de las veces a acciones que en poco o nada repercuten en la conservación de la biodiversidad.
Los grupos firmantes solicitarán al nuevo Gobierno, la retirada de ese proyecto Life presentado a Bruselas bajo el nombre de “Acciones para la conservación de las poblaciones ibéricas de oso pardo en cohabitación con actividades humanas”, al considerar que se trata de un fraude a la conservación de la naturaleza en España y del oso pardo en particular, planteando en realidad una mera estrategia de obtener recursos económicos de Bruselas, sin que el resultado final sea realmente positivo para la conservación de la especie.