EQUO defiende que la demolición del Algarrobico no se limite a «echarlo abajo» y reclama al Gobierno y la Junta de Andalucía, una demolición ecológica del hotel y una rehabilitación posterior de la zona; zona que el Tribunal Supremo ha reconocido como un área medioambiental protegida.
El partido verde cree que la comisión mixta formada por el MAGRAMA y la Junta de Andalucía debería contar con los vecinos y vecinas de Carboneras y los colectivos ecologistas.
EQUO defiende que la demolición del Algarrobico no se limite a «echarlo abajo» y reclama alGobierno y la Junta de Andalucía,una demolición ecológica del hotel y una rehabilitación posterior de la zona; zona que el Tribunal Supremo ha reconocido comoun área medioambiental protegida.
En este sentido, el partido verde apuesta por un modo distinto de abordar ambiental, social, técnica y económicamente la compleja situación de la playa del Algarrobico. Para EQUO, la comisión mixta formada por la Junta y el Ministerio de Medio Ambiente debería incluir un proyecto participativo que cuente con la implicación de los vecinos y vecinas, las organizaciones ecologistas y todos los colectivos implicados.
La plataforma ciudadana «Desmontando El Algarrobico», de la que EQUO es parte junto a otros 22 actores sociales y políticos, se ha reunido la semana pasada con el subdelegado del gobierno en Almería para pedir precisamente su participación en el proyecto de desmantelamiento del Algarrobico.
Para Carmen Molina, coportavoz de EQUO Andalucía y diputada “Es una oportunidad para hacer un proyecto innovador que no solo sirva para restaurar el valor ecológico de la zona, sino para crear empleo verde en la zona apostando por una buena gestión y reutilización de los residuos que generará la demolición”
Para Joaquín Arnalte, coportavoz de EQUO en Almería, “La restauración ambiental debe ser del 100%, incluyendo la rehabilitación del arroyo que existe en la zona, devolviéndole su salida al mar y repoblando con especies autóctonas”.