Con ánimo de ahorrar energía, potenciar un consumo más eficaz y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, el Ayuntamiento de Bilbao ha sustituido las lámparas alógenas de tipo incandescente de los 1.600 semáforos de titularidad municipal.
Los modelos previos de semáforo estaban compuestos por tres luces alógenas de 200 milímetros y dos más para la señalización de peatones y consumían una media anual de 1.230 kilovatios por hora. Con las lentes LED se ahorrarán 960 megavatios por hora al año, por cada 1.000 semáforos sustituidos, y se reducirán las emisiones de CO2 en 622 toneladas anuales. Asimismo, el consumo eléctrico también disminuirá en torno a un 80%. Los nuevos semáforos son, además, más seguros, ya que ofrecen una mejor visibilidad al no tener un fundido absoluto.
El consistorio bilbaíno ha mostrado su satisfacción porque esta medida generará ahorro en las arcas municipales, gracias a que 12.200 lentes han sido subvencionadas por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), que depende del ministerio de Industria, Turismo y Comercio. Por su parte, el área de Circulación y Transportes del ayuntamiento ha adquirido 2.200 lentes y se ha encargado de la instalación.
El coste total ha sido de 100.000 euros y será amortizado en 8 años.
Este proyecto arrancó en 2005 con la sustitución de las lentes del cruce entre la autopista AP-8 con Juan de Garay.