En un momento en el que el mundo registra un gran número de personas desoladas por la falta de recursos básicos, se ha creado la “ventana de la vida”. Muchos de los problemas a los que se enfrenta la humanidad y los propios ecosistemas tienen que ver con dos conceptos básicos: escasez y exceso.
La escasez de la que hablamos responde falta de las cosas vitales que las personas necesitamos para transitar una vida saludable. Recursos de esta índole son aire y agua limpios, suelos y bosques saludables o un refugio seguro. Este contexto se interpone con la abundancia de cosas dañinas que en realidad no necesitamos.
Ejemplos de ello son la basura, los productos químicos tóxicos, contaminación y comida chatarra. Aunque en muchos lugares del mundo se dan por sentado, el agua, los árboles, los minerales y otros recursos naturales del planeta son limitados.
Muchas personas necesitaban este invento y no lo sabían
Mientras el consumo desorbitado de energía y agua sigue acechándonos, ha surgido un invento capaz de crear agua “de la nada”. Podría verse como la ventana de la vida porque el agua es sinónimo de vida, dado que sin ella no podríamos continuar.
Un dispositivo del tamaño de una ventana que aprovecha el aire para conseguir agua potable segura. Ingenieros del MIT han creado un recolector de agua atmosférica que genera agua dulce en cualquier parte, incluso en el Valle de la Muerte, California.
En la actualidad, 2200 millones de personas del mundo no tienen acceso a agua potable. Estados Unidos tiene un registro de más de 46 millones de personas afectadas por la inseguridad hídrica. Una situación que se da porque donde viven no hay agua corriente o esta no es potable.
El aumento de la demanda de agua potable está teniendo como resultado el agotamiento de los recursos tradicionales como ríos, lagos y embalses. Para ofrecer mejoras de acceso al agua potable, segura y asequible, los profesionales del MIT han optado por aprovechar el aire.
Aire, la fuente de agua potable que podría salvar a millones de personas
Hay una gran cantidad de galones de agua en forma de vapor en la atmósfera. Si este vapor puede capturarse y condensarse de forma eficiente, podría aportar agua potable limpia en zonas en las que los recursos hídricos convencionales resultan inaccesibles.
Con este fin, el equipo del MIT ha elaborado y probado un nuevo recolector de agua atmosférica. Ha puesto de manifiesto que captura con carácter efectivo el vapor de agua y genera agua potable segura en un rango de humedades relativas, incluyendo el aire seco del desierto.
El nuevo aparato se trata de un panel vertical negro con el tamaño de una venta. Respecto a su composición, se confecciona con un material de hidrogel que absorbe agua. Está encerrado en una cámara de vidrio recubierta con una capa de enfriamiento.
El hidrogel es similar a un plástico de burbujas negro, con discretas estructuras en forma de cúpula que se hinchan cuando el hidrogel actúa como absorbente del vapor de agua.
Millones de personas encuentran consuelo ante la escasez de agua en este dispositivo
Cuando el vapor capturado se evapora, las cúpulas vuelven a encogerse. Después, el vapor evaporado se condensa en el vaso, donde fluye hacia abajo y hacia afuera mediante un tubo, como agua limpia y potable. El sistema realiza su funcionamiento de manera autónoma, sin una fuente de energía.
Hicieron funcionar este dispositivo por más de una semana en el Valle de la Muerte, California, la región más seca de América del Norte.
El equipo pronostica que varios paneles verticales, dispuestos en un discreto conjunto, podrían suministrar de forma pasiva agua potable a un hogar, abarcando también entornos áridos y desérticos.
Sumado a esto, la generación de agua del sistema debería subir con la humedad, brindando abastecimiento de agua potable aún en climas templados y tropicales. Ese recurso del que hoy millones de personas carecen pronto podría ser algo al alcance de su mano. Un objetivo que también pretende cumplir este cubo productor de 500 litros de agua.