La alerta sanitaria en alimentos en mal estado o con restos que pueden ser un peligro es un tema de gran importancia para la salud pública y la seguridad alimentaria. Cuando los productos alimenticios se encuentran en condiciones inapropiadas para el consumo, pueden representar riesgos significativos, como intoxicaciones, enfermedades gastrointestinales e incluso complicaciones severas en personas vulnerables.
La detección y gestión oportuna de estos productos es crucial para prevenir daños a la población. Como se ha hecho con un lote de galletas de Fontaneda, concretamente las galletas PIM’S, donde se han encontrando restos metálicos. Sin duda, una alerta más que justificada para un snack que sobre todo consumen los más pequeños de la casa.
Alerta con las galletas Fontaneda
La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) ha informado de un problema que afecta a un lote de unas galletas muy conocidas de Fontaneda, empresa perteneciente a Mondelēz España. Según se ha informado, en los procesos de autocontrol realizados por el fabricante se ha detectado la posible presencia de fragmentos metálicos en un lote de galletas con chocolate rellenas. Ante esto, se ha informado a las autoridades y se procede a retirar de la distribución el alimento afectado.
¿Cómo han podido llegar estos restos metálicos? Probablemente sea debido a algún fallo en el proceso de elaboración o embalaje, pero el riesgo está ahí. Concretamente en las galletas PIM’s Naranja, de la marca Fontaneda que se venden en un envase de 150 g, de cartón.
Para ser más exactos, el lote afectado es el OHT1153212, con fecha de consumo preferente 30/4/2026 y el código de barras que identifica el producto es el 7622201639815. Desde Mondelēz aseguran que el problema está localizado y han procedido a retirar de la venta el lote afectado.
¿Qué hacer en caso de tener un paquete afectado?
Lo primero de todo es comprobar si las galletas PIM’S que tienes no son las afectadas, simplemente mirando en el lateral el número de lote y la fecha de consumo. Si tienes una caja de las galletas afectadas, no las consumas. Y si ya lo has hecho, atento a los síntomas: ante la menor duda, acude al médico.
Los alimentos que comemos deben ser seguros. Por eso las empresas del sector alimentario deben llevar a cabo, de forma programada, una serie de controles para asegurar que los alimentos no implican riesgos para el consumidor, además de contar con procesos establecidos y seguros que reduzcan la posibilidad de contaminación en las distintas fases del proceso: ese sistema de autocontrol es fundamental para la seguridad, y sirve para detectar este tipo de problemas
La presencia de elementos extraños en alimentos está detrás de bastantes alertas de seguridad alimentaria. Detrás de un caso así puede haber un error, un descuido o un fallo en el proceso, pero ingerir un producto con fragmentos metálicos, por diminutos que sean, puede ser peligrosos, y más en un caso como este, un dulce que pueden comer los más pequeños de la casa.
En resumen, la presencia de estos restos metálicos en estas galletas puede ser resultado de errores en la cadena de suministro o falta de control en la producción o distribución. Sea como sea el aviso está dado acerca de estas galletas de la marca Fontaneda para evitar riesgos innecesarios a los consumidores y ser precavidos. ECOticias.com