La tecnología existe hace más de una década para enviar las facturas electrónicamente por email e internet y sustituirlas por las facturas impresas. Esto ahorraría una cantidad inmensa de desperdicios anuales de papel que en su mayoría termina en los vertederos (90% según el último estimado de la ADS, pues sólo 10% se recicla). Pero, cuánto representaría en economía al gobierno
Veamos, en Puerto Rico hay unos 1,100,000 abonados. Si lo multiplicamos por $0.55 para tomar en cuenta el costo aproximado conservador de sello postal, papel de factura, 2 sobres (el de envío y el de pago) y tinta, y lo multiplicamos por 12 meses y por las 3 agencias de servicio de agua, luz y teléfono (AAA, AEE y PRTel), esto equivale a unos $21.8 millones de dólares cada año!
Si tomamos en cuenta que no toda la población tiene acceso a internet; siendo conservadores digamos que sólo 50% población podría pagar sus cuentas por teléfono o internet. Aún así los ahorros serían de $10.9 MILLONES al año. No está mal, considerando que también estaríamos ayudando al planeta pues el volumen de desperdicios en los vertederos implica más emisiones de gas metano, el cual es 22 veces más fuerte que el CO2 en calentar la atmósfera.
Este estimado no incluye el sueldo de la gente que trabaja en el gobierno llenando sobres, imprimiendo las facturas, llevándolos al correo, gastos de transporte, electricidad para imprimir, gasolina, etc. Recordemos que los ahorros en gasolina y electricidad también ayudan al planeta reduciendo las emisiones de gases de invernadero a la atmósfera.
¿Cómo puede el gobierno incentivar a que los abonados dejen de requerir facturas en papel? Ofreciendo un crédito de $5 a todo el que se acoja a las facturas electrónicas y eco-amigables. Así lo hacen con éxito muchas compañías de tarjetas de crédito.
Hay dos crisis actuales en Puerto Rico que ameritan que el gobierno tome acción en este respecto y en medidas similares; la situación fiscal que obviamente requiere ahorros de todas partes, y situación crítica de los vertederos en la isla (se espera que para el 2020 queden sólo 4 de los 22 vertederos que operan actualmente, de los 64 que operaban en el 1994). En adición a esto hay una crisis global que no podemos negar en nuestra isla por ser parte del planeta, que es el cambio climático. Esta simple medida combatiría estas tres crisis y traería encima de todo una economía potencial de al menos $10 millones al fisco.
De hecho, hace tiempo recibo mis estados de cuenta por correo electrónico y los pago sin usar el sobre que me llega por correo. Puedo pagar por teléfono o internet desde hace más de una década. Sin embargo cuando llamé a una de las agencias a pedirles que no me enviaran más la factura en papel por entender que es un desperdicio de recursos y un gasto económico, me dijeron que eso era mi derecho, que no podía dejar de recibirlo. Un derecho por el cual el pueblo tiene que pagar sobre $21 millones anualmente, sin contar el impacto ambiental, y sus consecuencias en la salud y seguridad del pueblo.